El sistema inmunitario es un sistema complejo, compuesto por células, tejidos y órganos cuya función principal es protegernos de agresiones o sustancias externas tales como microorganismos, alergenos o agentes tóxicos.
Si quieres mejorar tu sistema inmunitario te preguntarás cómo puedes ayudar a tu cuerpo a combatir enfermedades.
«Reforzar tu salud inmunitaria realizando cambios en tu estilo de vida y alimentación puede fortalecer las defensas naturales de tu cuerpo.
Consejos saludables
Diferentes estudios proponen que la nutrición afecta a todos los procesos fisiológicos incluyendo aquellos que regulan nuestro sistema inmunológico», explica la doctora Priscilla Lora, nutrióloga clínica hospitalaria del Hospital Metropolitano de Santiago, quien a continuación comparte 10 consejos para fortalecer tu inmunidad de forma natural:
- Sigue una dieta limpia y balanceada: mantener cantidades óptimas de diferentes nutrientes en el organismo es esencial para garantizar la síntesis de diferentes factores y mediadores del sistema inmunitario.
- Toma suficiente agua: una hidratación adecuada es necesaria para el correcto funcionamiento del sistema inmunitario, ya que ayuda a transportar a todo el cuerpo nutrientes, células inmunitarias y anticuerpos.
- Ejercítate regularmente: durante la actividad física moderada se liberan hormonas immunopotenciadoras. Algunas investigaciones sugieren que las personas que hacen ejercicio tienen mayor resistencia a las enfermedades infecciosas.
- Toma probióticos o alimentos fermentados: los alimentos fermentados son ricos en bacterias beneficiosas llamadas probióticos, que se encuentran en gran cantidad en todo tu tracto digestivo. De un 70-80% de las células inmunitarias se encuentran en tu tracto digestivo. Tu sistema inmunitario y tu intestino tienen una relación simbiótica, por lo que la salud de tu intestino afecta directamente la salud general de todo tu sistema inmunitario.
- Limita los azúcares añadidos: reducir el consumo de azúcar, así como los carbohidratos refinados, puede disminuir la inflamación y ayudar a perder peso, reduciendo así el riesgo de enfermedades crónicas como diabetes tipo 2 y enfermedades cardíacas.
- Exponte al sol: el sol regula el ritmo circadiano, y por tanto los niveles hormonales que afectan al sistema inmunitario. La exposición solar estimula la síntesis de vitamina D, que tiene un papel relevante en la modulación de la respuesta inmune.
- Maneja el estrés: un estilo de bajo estrés prolongado hace que tu cuerpo libere cortisol (hormona inmunosupresora); el estrés promueve la inflamación, así como los desequilibrios en la función celular inmune.
- Duerme lo suficiente: el sueño y la inmunidad tienen una estrecha relación. El sueño refuerza la inmunidad innata, que es nuestra primera línea de defensa ante las infecciones. La falta de sueño disminuye la función de células claves para defendernos de las infecciones, como los linfocitos T, las células NK y los monocitos.
- Limita la ingesta de alcohol: el consumo excesivo de alcohol puede debilitar nuestro sistema inmunológico. Las células de defensa del cuerpo tienden a atacar el alcohol por considerarlo una sustancia tóxica.
- Practica la buena higiene: una buena higiene evitará la exposición a patógenos.
