A tres años de primarias que dividieron al PLD y cambiaron panorama político

SANTO DOMINGO.- Ayer se cumplieron tres años de las primarias abiertas del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que terminaron con dividir ese partido y transformar el panorama político del país.

Inolvidable fue aquel día del balotaje en que se enfrentaron Leonel Fernández y Gonzalo Castillo por la candidatura presidencial del PLD, la cual resultó empañada por acusaciones de fraudes mediante supuestas manipulaciones de un algoritmo en los centros de cómputos de la Junta Central Electoral (JCE).

Sin embargo, la tarde de aquel 6 de octubre de 2019 había sido marcada por el entusiasmo de las personas que acudían a ejercer su derecho al voto. Y es que, a pesar de los debates y objeciones que se habían dado sobre el mecanismo electrónico, nadie imaginaba lo que acontecería al caer la noche.

Ya se habían instalado las computadoras con gráficas en cada centro de campaña de los dirigentes políticos que se disputaban la candidatura para ver en tiempo real el conteo de los votos de sus simpatizantes.

Al cerrarse de manera oficial los centros de votaciones, la JCE procedió con el conteo de los votos que se podían visualizar a medida que este se actualizaba con el pasar de las horas.

Mientras las horas transcurrían y los gráficos de las computadoras daban arriba a Leonel sobre Gonzalo, al momento de que se había contado alrededor del 73% de los votos y con un margen, a juicio de muchos, considerablemente difícil de variar; los simpatizantes del tres veces presidente de la República ya rebosaban de alegría y felicidad en su centro de campaña, el cual se ubicaba en uno de los salones de un reconocido hotel de la capital.

Muchos de ellos comenzaron a festejar con bailes de merengues y cantando a todo pulmón que volvería Fernández a la Presidencia; hasta que todo comenzó a cambiar.

Los gráficos de Leonel se detuvieron; contrario a los de Gonzalo que se acercaban de manera vertiginosa a los de su competidor. Los semblantes de los seguidores del expresidente cambiaron y la música que opacaba el ambiente fue apagada.

Nadie podía creer que Gonzalo ya estaba superando a Leonel en las gráficas de las computadoras colocadas por la JCE, por lo que de inmediato el equipo del exmandatario convocó a los medios a una rueda de prensa improvisada en el mismo centro de campaña para declarar fraudulentas las primarias abiertas del PLD.

Aquellas alegaciones por parte de Fernández se dieron cuando todavía no se había cumplido el conteo que, en principio, le dio la ventaja y lo mantuvieron arriba durante la mayor parte del tiempo; hasta que al bordear el final del proceso se dio el cambio en el ritmo de las votaciones que finalmente le dieron la victoria a Castillo.

Los resultados de las primarias abiertas del PLD fueron concluyentes: 48.72% (911,923 votos) a Gonzalo Castillo y 47.29% (885,233) a Leonel Fernández.

El supuesto fraude

Días después y a través de un discurso televisado, Fernández  reveló que los votos de las primarias abiertas fueron interceptados y adulterados junto a los cómputos de la JCE para ser manipulados en su contra.

Según el expresidente, el fraude abarcó 671 mesas que representaban 707,390 electores. No obstante, la manipulación se llevó a cabo en diferentes frentes.

Un primero que se registró desde un hotel ubicado en la zona turística de Punta Cana, pero que realmente operó desde un punto, en el que con precisión se ubica en la Autopista del Coral.

Un segundo frente estuvo operando en el cuadrante comprendido entre las avenidas Abraham Lincoln y Charles Summer, hacia el norte, y la avenida José Amado Soler, hacia el sur.

Y un tercer frente funcionó desde una villa de Casa de Campo, en La Romana, bajo la dirección de un reconocido hacker, de nacionalidad india, autor de varios manuales sobre cómo realizar esas prácticas delictivas.

La división del PLD

Y entre dimes y diretes internos dentro del partido, dieciséis días después de que se realizaran las primarias abiertas del PLD, Fernández anunció su renuncia de manera irrevocable a su condición de presidente y miembro de esa organización política

“Ahora, con mucho pesar, ha llegado la hora de partir. Sobre la marcha, tal vez sin advertirlo a tiempo, nos diferenciamos. Hay quienes no podemos vivir en medio de la mentira, el engaño, la manipulación, el doblez, el irrespeto, la petulancia, el incumplimiento de la palabra empeñada, la simulación, la hipocresía y la desfachatez”, manifestó en ese momento.

La salida del poder

El PLD se encontraba dividido. Por un lado, el entonces presidente Danilo Medina apoyaba a quien fuera su ministro de Obras Públicas; y por el otro, Leonel creaba un nuevo partido político llamado Fuerza del Pueblo.

Era el fin del bipartidismo en la República Dominicana, y aunque la Fuerza del Pueblo era una nueva opción política; sería suficiente para que el PLD no fuera el mismo. Y es que una serie de hechos desafortunados afectaron la imagen del entonces partido oficialista, y un ejemplo fue el fracaso de las elecciones municipales de febrero de 2020.

Las cancelaciones de esos sufragios por parte de la JCE debido a supuestas irregularidades desencadenaron multitudinarias protestas en la Plaza de la Bandera que terminaron de sellar el destino de las siguientes elecciones.

Prueba de eso fueron las derrotas del PLD, tanto en las municipales del 15 de marzo como en las presidenciales del 5 de julio de ese año.

Esas estrepitosas derrotas dibujaron completamente una nueva realidad política, la cual se consolida en la actualidad con tres partidos poseedores de una militancia sólida. Un presidente de la República promocionado para la reelección por sus funcionarios y un tres veces presidente de la República que busca llegar por cuarta ocasión.

Mientras que el PLD, golpeado como ningún otro desde su salida del poder, busca este próximo 16 de octubre afianzar su posición durante la consulta que escogerá a su nuevo candidato presidencial de cara a las elecciones de 2024.

DALTON HERRERA

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