Ante el ojo público: ¡Ay!, esos pleitos de marido y mujer…

Dice un vie­jo dicho que en pleito de marido y mujer nadie se debe meter. Sin embar­go, esto no aplica a algunos casos de la farándula domi­nicana, en la que las ruptu­ras amorosas y problemas en el matrimonio han tras­cendido tanto que muchos se consideran con derecho a opinar sobre el tema.

De acuerdo a la sexólo­ga Heidy Camilo, esta si­tuación se genera porque las figuras hacen de su re­lación un elemento tan pú­blico que las personas están detrás de las pantallas asu­men un falso sentido de co­hesión.

“Las personas asumen una postura que ellos son miembros de esa familia o de esa relación, y esto tie­ne que ver con la cantidad de información que brindan en las redes sociales acerca de su intimidad y eso crea en sus espectadores esa fal­sa percepción de pertenen­cia”, explica Camilo a LIS­TÍN DIARIO.

Un ejemplo de esto, es lo que actualmente está pasando con el matrimo­nio del cronista deportivo, Franklin Mirabal y la pre­sentadora de televisión Dia­nabell Gómez, quienes es­tán en boca de la farándula desde que salió a la luz pú­blica que se separaron.

Los Franknabel
“Los Franknabel”, co­mo se le llegó a llamar a la pareja, protagonizaron una de las uniones más so­nadas de la farándula do­minicana con la publicita­da y sobreexpuesta “Boda deportiva”(realizada el 10 de febrero de 2019) y así mismo está pasando con su separación.

El mismo periodista anunció que ofrecerá una entrevista para dar todos los detalles sobre la misma.Hace unas semanas salió a la luz pública que Dianabell y Franklin estaban en pro­ceso de divorcio y desde ese momento la pareja ha utili­zado sus redes sociales para acusarse mutuamente y ser la “comidilla” de un públi­co que se siente en libertad de opinar sobre la fallida re­lación y que espera nuevos capítulos de esta triste his­toria.

Las mozaristas
Otro de los casos gira al­rededor del exponente ur­bano Mozart la Para. Ha pa­sado más de un año desde que el exponente urbano y Alexandra Hatcu se separa­ron, poniendo punto y final a una relación de más de una década.

 Sin embargo, los segui­dores de ambos aún no su­peran la ruptura y es tanto así que en cada publicación de ellos siempre hay perso­nas que recuerdan el “ma­trimonio MVP”.

El cantante urbano y la instagramer vivieron un matrimonio idílico. Según sus publicaciones en las re­des sociales, llegaron a con­siderarse “la familia perfec­ta” junto a su pequeña hija, Charlotte, pero este sueño se rompió cuando en marzo del año pasado anunciaron que el amor se había acaba­do. Un mes después el intér­prete de “Si te pego cuerno” hacía pública su relación con la actriz Dalisa Alegría.

Otra relación mediáti­ca fue la de Tueska y Eve­lio Herrera. Por más de 11 años la cantante y el empre­sario artístico mantuvieron una vida más allá de lo la­boral, ante el ojo público.

Además de la pasión por la música compartie­ron el amor, pero esta lla­ma se apagó, encendiéndo­se otro fuego, esta vez fuera de la casa, en los tribunales, cuando dos años después de casarse la colombiana interpuso una demanda en contra del empresario por presunta violación a las dis­posiciones sobre violencia intrafamiliar.

Por varios años, Tueska y Evelio protagonizaron una novela que parecía no te­ner fin. El año pasado am­bos llegaron a un acuerdo que estipulaba que la artis­ta podría retomar su carrera libremente y continuar con su vida artística sin la obje­ción de un contrato que la mantuvo atada.

Don Miguelo
Don Miguelo y Nabila Ta­pia también caben en la lis­ta. La pareja, que lleva va­rios años separada, y una hija en común, fue prota­gonista de muchos titulares por su polémica conviven­cia, que siempre terminaba siendo comentada entre sus seguidores.

La sexóloga Heidy Cami­lo recomienda poner una lí­nea fronteriza entre lo pú­blico y lo privado. Aconseja que para evitar el escánda­lo, las figuras y toda perso­na común y corriente limite la información que ofrecen a los demás especialmente en las redes sociales.

EN EL PASADO
Caso recordado.

Los cantantes Vakeró y Martha Heredia prota­gonizaron una relación muy mediática. Ellos se casaron en secreto, pero fue público cuando am­bos entraron en conflic­tos judiciales. En el 2013 la ganadora de “Latin American Idol” acusó al “Cantante de los raperos” de violencia de género. Él guardó prisión por dos meses. Siempre negó ha­berla agredido. En 2014 los artistas quedaron di­vorciados, no sin antes haber dejado escrita una controversial histórica en la farándula dominicana.

Salir de la versión móvil