Una gran redada policial en Long Island, una región asolada por la violencia de las pandillas criminales al este de Nueva York, ha concluido con 116 delincuentes detenidos de los cuales casi la mitad pertenecían a grupos como la MS-13 o los Latin Kings, informaron este jueves las autoridades.
La operación, llamada «Long Island Wave» y puesta en marcha a principios de este mes, ha durado casi dos semanas y movilizado a unos 200 agentes de una decena de cuerpos policiales, dijo en una rueda de prensa a los medios locales el comandante del servicio federal de alguaciles, Ed McMahon.
Las autoridades han realizado la redada ante la llegada del verano, que suele ir acompañado de un repunte de la criminalidad, y han buscado a fugitivos sobre los que recaían órdenes de arresto por delitos de homicidio, intento de asesinato, narcotráfico, posesión de armas o robo, recoge el canal ABC7.
Entre los detenidos, 69 pertenecían a alguna pandilla, incluyendo la MS-13 (Mara Salvatrucha), los Latin Kings, los Crips y los Bloods, que desde hace años aterrorizan a los vecinos de Long Island con violencia cruzada entre sus grupos o contra los residentes de la zona, muchos de ellos jóvenes e incluso menores de edad.
McMahon, en declaraciones a la radio local 1010Wins, recalcó la necesidad de «sacar de las calles» rápidamente a pandilleros que estén en búsqueda por delitos como un robo, «porque quizás la semana siguiente provocan un tiroteo en una barbacoa familiar de una banda rival».
EFE