El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció este viernes un nuevo atraso de la logística para buscar dos millones de dosis de la vacuna anticovid del laboratorio AstraZeneca fabricadas en India, una noticia que incentivó aún más una jornada de protestas que tuvo lugar en varias ciudades.
«Fue todo acertado para tener disponibles dos millones de dosis. Solo que hoy, en este exacto momento, está comenzando la vacunación en India. Es un país con mil millones (de habitantes). Entonces, se atrasó en uno o dos días hasta que el pueblo comience a ser vacunado allá», declaró Bolsonaro en una entrevista con la TV Bandeirantes.
Brasil, uno de los tres países más afectados por la pandemia del nuevo coronavirus en números absolutos junto a Estados Unidos e India, montó una operación para traer al país dos millones de dosis del inmunizante esta semana y oficializar el inicio de la vacuna en un acto que está previsto para el próximo miércoles en Brasilia.
Sin embargo, el Gobierno comunicó el mismo jueves que la aeronave permanecería un día más en el país para ultimar los detalles logísticos y protocolarios con el Gobierno de India, mientras que el presidente admitió hoy que la operación se retrasará unos días más.
«Allá también hay presiones políticas de un lado y de otro. Eso es lo que veo, pero de aquí a dos o tres días, máximo, nuestro avión va a partir y traer esos dos millones de vacunas para acá», manifestó Bolsonaro.
Brasil, que superó las 208,000 muertes relacionadas a la covid-19 y acumula casi 8,4 millones de casos confirmados, tiene previsto iniciar la vacunación en todo su territorio el próximo miércoles, aunque ninguna vacuna haya sido aprobada por la agencia reguladora de salud hasta el momento.
CACEROLAZO
A través de las redes sociales, organizaciones no gubernamentales, movimientos sociales y varios partidos convocaron a una jornada de cacerolazos que se sintió en diferentes ciudades de todo el país.
La movilización fue impulsada por la situación caótica por la que pasa el estado de Amazonas (norte), principalmente su capital Manaos, que sufre una grave crisis debido a la falta de camas hospitalarias y oxígeno para tratar los pacientes.
Las cacerolas resonaron con fuerza en diversas ciudades brasileñas en protesta contra Bolsonaro y en denuncia por su falta de gestión ante la pandemia, así como su negacionismo y el atraso en el inicio de la vacunación.
Bajo gritos de «Fuera Bolsonaro», «Bolsonaro genocida» y «Vacuna ya», fueron registradas manifestaciones en ciudades como Sao Paulo, Río de Janeiro, Belo Horizonte, Recife Curitiba y la capital Brasilia, entre otras.
Asimismo, diversas personalidades se manifestaron en las redes sociales y alzaron la voz contra el mandatario y la grave situación que el país atraviesa.
Entre ellos el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien expresó en un mensaje en su cuenta de Twitter su «angustia, preocupación e indignación» con la «situación del pueblo de Manaos».
«Manaos vive una tragedia humana sin precedentes en su historia, preanunciada por el colapso del sistema de salud en el inicio de esta pandemia», añadió Lula, quien agradeció la movilización de artistas, de los gobernadores de otros estados y de Venezuela, que se ofreció a suministrar el oxígeno que está en falta en hospitales.
«Desde el primer día como presidente de la República, Bolsonaro insulta a los artistas y a la cultura, a los gobernadores y al pueblo venezolano», subrayó Lula, quien agradeció al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, por su solidaridad.
EFE