SANTO DOMINGO.- La Cámara de Cuentas publicó este viernes los resultados de la auditoría financiera que realizó al Ministerio de Salud Pública, en el período comprendido entre 2012 y 2015, gastó de manera irregular más de 310 millones de pesos en compra de medicamentos, kits de salud y material gastable.
Este monto, según la referida entidad, está compuesto por dos procesos de compras, uno valorado en RD$260,597,166 y otro en RD$49,619,273, aunque ambos ocurrieron de manera similar.
De acuerdo con la Cámara de Cuentas en que este par de contrataciones fueron gestionadas luego de que Salud Pública, en ese entonces presidida por Wilfredo Lorenzo “Freddy” Hidalgo, las catalogara de “urgencia”.
Sin embargo, las autoridades aseveraron que estos procesos de compras se llevaron a cabo sin cumplir con las exigencias de la Ley, alegando que en ninguno de los casos existe documentación que justifique la justificación de esta clasificación.
En el de los RD$260,597,166, los auditores aseguraron que esta compra no cumplía con las características de “situaciones de urgencia”, puesto que los medicamentos y kits de hemodiálisis que se supone iban a ser comprado con este dinero, ya estaban contemplados en el plan anual de compras de ese año.
En cuanto al dinero restante, este correspondió a la compra de medicamentos y material gastable de la Semana Santa del 2013, y la Cámara de Cuentas afirmó que también se obvió el protocolo establecido, además de acusar a los responsables de Salud Pública de esa época de no planificar de manera efectiva para el asueto.
“Se evidencia que la entidad no realiza una planificación efectiva en cuanto a los servicios, bienes y suministros de medicamentos, por todo el período fiscal, conforme a sus objetivos institucionales establecidos”, leía parte del informe de los auditores.
Asimismo, esta compra también incumplió varios aspectos de la Ley, como la publicación de la licitación en el portal; las invitaciones a presentar ofertas debidamente acusadas; publicarlas en periódicos de circulación nacional; establecer las especificaciones técnicas.
También elaborar un registro de interesados; un registro de participantes; uno de ofertas económicas de los oferentes participantes; dar apertura de ofertas económicas; la adjudicación y aprobación de reporte de lugares ocupados y la notificación de adjudicación.
Exministro se defiende
Por su parte Hidalgo, quien fue uno de los imputados en el caso Antipulpo, fue citado en varias ocasiones en el informe de la Cámara de Cuentas, defendiendo ambos procesos de compra.
En el caso de los 260 millones de pesos, explicó que la decisión de catalogarlo como una compra de “urgencia” se debió a que cuando tomó las riendas del Ministerio existía un “desabastecimiento” de medicamentos.
“Iniciando el año 2013, debido al desabastecimiento de medicamentos del programa protegido o de enfermedades de altos costos, y para hacer frente a esta situación, de forma oportuna y efectiva, apelamos a las herramientas que nos da la Ley 340-06, como es acudir a declaratorias de urgencias que nos permitiera acortar los procesos”, expresó.
Esto, de acuerdo con el exfuncionario, lo hizo con el objetivo de hacer más accesible el tratamiento de enfermedades catastróficas.
Sin embargo, la actual directora de compras y contrataciones de Salud Pública, Marlene Fernández Vargas, dijo que su departamento no cuenta con archivos físicos ni virtuales de esa contratación, añadiendo que este tipo de procesos deben contar con un informe y una resolución que explique por qué se declara la urgencia.
En cuanto al plan de Semana Santa, Hidalgo aseguró que esos gastos no estaban contenidos en el presupuesto anual, y como su gestión inició en el primer trimestre del año, no había tiempo suficiente para una licitación pública regular.