China dejará de participar en la construcción de plantas eléctricas de carbón en el extranjero como parte de sus planes para combatir el cambio climático, según anunció este martes ante la ONU su presidente, Xi Jinping.
En un discurso por video ante la Asamblea General de Naciones Unidas, Xi aseguró que su Gobierno va a reforzar su apoyo a otros países en vías de desarrollo para que pongan en marcha fuentes de energía limpias.
«Tenemos que acelerar la transición a una economía verde y baja en emisiones de carbono», insistió el presidente de China, que es uno de los principales apoyos de la construcción de grandes infraestructuras en otros países, sobre todo a través de su iniciativa conocida como la «Nueva Ruta de la Seda».
Según organizaciones medioambientales, el Banco de China -controlado por el Estado- es el mayor financiador de proyectos de carbón en el mundo.
Mientras, en su territorio, el Gobierno chino sigue invirtiendo en plantas de carbón y sigue añadiendo capacidad eléctrica por esta vía año tras año, lo que complica los esfuerzos climáticos.
Xi reiteró hoy que China buscará que sus emisiones de dióxido de carbono alcancen su punto máximo antes de 2030 y lograr la neutralidad del carbono -emitir la misma cantidad que se retira por otras vías- antes de 2060.
Las palabras del presidente chino se producen en medio de intensos debates en la comunidad internacional sobre nuevas medidas para combatir el cambio climático, que se espera que cristalicen en la próxima cumbre del clima (COP26) que se celebra en noviembre en Glasgow (Reino Unido).
EFE