El 13 de enero de cada año se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra la Depresión, efeméride con la que se busca sensibilizar, orientar y prevenir a la población sobre este trastorno.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, se estima que la depresión afecta a un 3,8 % de la población en el ámbito mundial. Dadas las cifras, es muy probable que todos conozcamos a una persona con esta enfermedad, así sea alguien lejano, como el amigo de un amigo, o tan cercano como la pareja.
Dado que la depresión provoca un desequilibrio emocional que interfiere en la vida personal, sobrellevar una relación con alguien con este trastorno no es fácil. Sin embargo, es importante tener presente que nuestras palabras y acciones pueden incidir en que la situación de la pareja mejore.
Identificar las señales
Lo primero a tomar en cuenta es que la depresión no es sinónimo de tristeza. La tristeza es una emoción natural, como el amor, el enojo o la frustración. Pero cuando ese sentimiento de tristeza impide a la persona realizar sus actividades cotidianas, como estudiar o trabajar, es motivo de alerta.
“Si la pareja muestra un estado de ánimo triste, disfórico o irritable durante la mayor parte del día, por más de dos semanas, muestra anhedonia o disminución en la capacidad para disfrutar o mostrar interés y placer en las actividades habituales, es posible que esté deprimida”, refiere Yahayra Rodríguez, psicóloga terapeuta del Instituto de Salud Mental y Telepsicología (@telepsicologiard).
La disminución o el aumento de peso o del apetito, presentar insomnio o hipersomnio (es decir, dificultades para descansar, ya sea porque se duerme menos de lo que se acostumbraba o porque se duerme más), así como sensación de debilidad física, sentimientos recurrentes de inutilidad o culpa, disminución de la capacidad intelectual, pensamientos distorsionados de la realidad y pensamientos recurrentes de muerte o ideas suicidas son otros síntomas de estar pasando por un cuadro depresivo.
“La presencia de algunas de esas manifestaciones durante un tiempo prolongado y persistente nos ayuda a identificar que la pareja ha estado o se encuentra en un estado depresivo”, explica la profesional.
Cómo ayudar
Como todo trastorno de salud mental, la depresión debe ser tratada por un profesional en el área. Y aunque está claro que no podemos “curar” a nuestra pareja, hay formas de apoyarla y ayudarla a superar esta difícil situación.
“La mejor forma de ayudar es mostrando comprensión, empatía y estar atento, dando seguimiento a su evolución”, indica Rodríguez. A eso añade que ofrecer el apoyo que necesita la pareja en esos momentos de depresión no solo le ayuda a la persona a salir del cuadro depresivo, sino que también ayuda a la relación, de una forma sana, duradera, y funcional, y a su vez ayuda a que todo el sistema familiar se beneficie.
“Esto, entendiendo que, dentro de una relación funcional y saludable, si mi pareja se encuentra bien de salud a nivel físico y mental, yo también estaré bien”, dice. La profesional hace énfasis en no tomar a modo personal la situación por la que esté pasando la pareja y entender que lo que le ocurre no está bajo su control voluntario.
Si tu pareja está pasando por un proceso de depresión, la psicóloga recomienda de forma puntual:
- Mostrarle validación.
- Escucharle sin juzgar y hacerle entender que estás para él o ella.
- Evitar hacer reproches que le hagan sentir culpa por lo que siente o padece en el momento.
- Mostrarle compresión y paciencia en todo el proceso.
- Motivarle a aumentar o realizar las actividades cotidianas por las que antes mostraba interés.
- Acudir a un profesional de la salud mental para que les de las herramientas adecuadas, tanto a ti que cuidas de tu pareja como a la persona que la padece, entendiendo que cada persona y cuadro depresivo es distinto.
- Al buscar la ayuda profesional, acompáñale y motívale siempre a asistir al proceso psicoterapéutico.
LAURA ORTIZ