SANTIAGO DE LOS CABALLEROS, República Dominicana.-Intentó suicidarse en el lugar donde guarda prisión el cabo de la Policía, Alejandro Castro Cruz, a quien se le acusa de ser el principal responsable de la muerte accidente de un niño de once años durante la celebración del carnaval de esta ciudad el domingo último.
El abogado asignado para defender al agente ofreció la información y aseguró que Castro Cruz, de 30 años de edad, está arrepentido de su actuación durante el incidente, en que resultó muerto el menor.
«Hay unas serie de situaciones que nos estuvieron comunicando de él, supuestamente hasta intentó quitarse la vida, lo digo responsablemente», explicó el jurista a la prensa, según reporta el periódico El Día.
APLAZAN COERCIÓN
La Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de Santiago aplazó para el próximo 22 de febrero la audiencia para conocer medidas de coerción contra el cabo de la Policía Nacional acusado de matar al menor Donaly Martínez.
La jueza Kimberly Tatis decidió aplazar la audiencia en atención a la solicitud de los abogados de la defensa técnica del imputado, Alejandro Castro Cruz, quienes solicitaron un plazo para presentar los arraigos de su defendido, informó la Procuraduría General de la República (PGR) en un comunicado.
A la salida del tribunal, el titular de la Fiscalía, Osvaldo Bonilla, reiteró que en este caso se debe imponer prisión preventiva, porque se trata de un hecho grave, donde el imputado violentó todos los protocolos de proporcionalidad y uso de la fuerza.
VIOLACIÓN DE VARIOS ARTICULOS DEL CODIGO PENAL
El Ministerio Público tipificó los hechos como una violación de varios artículos del Código Penal que tipifican y establecen sanciones contra el abuso de autoridad en contra particulares, golpes y heridas, así como también el homicidio voluntario en perjuicio de la víctima y su padre, Anthony Ysauri Martínez.
El órgano de justicia ha solicitado que se imponga la prisión preventiva por espacio de 12 meses contra el cabo de la Policía, Alejandro Castro Cruz y/o Alejandro Castro de la Cruz, de 30 años de edad.
LOS HECHOS
La muerte del adolescente se produjo el pasado domingo durante la irrupción de una patrulla policial en la celebración del carnaval de Santiago, festejo del que disfrutaban el menor y sus familiares.
El imputado, “en actitud desafiante y agresiva, portando su arma de fuego visible”, ordenó bajar el volumen de la música e intentó ocupar el cajón de música de un vehículo, bocina que un testigo de los hechos guardó, atendiendo a la orden del agente, señala la nota.
Sin embargo, la instancia refiere que el cabo policial insistió en llevarse la bocina, lo que desató una discusión en la cual se involucraron la víctima y su padre, a quien el imputado roció gas pimienta en los ojos.
Finalmente, el cabo policial se alejó con la bocina y, sin motivo aparente, regresó y apuntó con su arma manipulada a Martínez y, al hacer contacto con este, disparó el artefacto alcanzando al menor “en el brazo izquierdo y en el tórax», heridas que le ocasionaron la muerte.
MINISTERIO PÚBLICO VE IRRESPONSABILIDAD PENAL
El Ministerio Público dijo contar con elementos probatorios que demuestran la responsabilidad penal que pesa contra Castro Cruz, incluyendo pruebas materiales, documentales, periciales y testimoniales.
Entre las pruebas se incluye el informe preliminar de la autopsia, emitida por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), que determinó que la causa de muerte del niño de 11 años fue «herida por proyectil de arma de fuego, muerte violenta, de etiología médico legal homicida, mecanismo choque hipovolémico».
Según el abogado asignado para la defensa de Castro Cruz afirmó en declaraciones a la prensa que el cabo habría intentado «quitarse la vida», aunque no ofreció más detalles sobre el suceso, ya que solo tiene información preliminar al respecto.
EFE