El gobierno del presidente Joe Biden comenzará el martes a recibir nuevas solicitudes de padres que deseen reunirse en Estados Unidos con sus hijos que aún permanezcan en Centroamérica, en un intento por reunificar familias y disuadir a los menores a que emprendan una travesía peligrosa por la frontera, dijeron el lunes dos funcionarios.
“Estamos comprometidos firmemente con la acogida de personas a Estados Unidos de una manera humana y con respeto, y a reunir a las familias”, expresó una de las funcionarias en una rueda de prensa telefónica. “Estamos cumpliendo nuestra promesa de promover una migración segura, ordenada y humana desde Centroamérica a través de esta expansión de vías legales para buscar protección humanitaria en los Estados Unidos”.
La iniciativa es parte del programa de menores centroamericanos conocido como CAM, por su nombre en inglés, que había sido cerrado bajo la anterior administración del presidente Donald Trump.
El gobierno de Biden reabrió el programa en marzo y hasta ahora había procesado más de 1.000 casos que habían quedado sin concluir antes de su cierre en 2018.
Creado en 2014 por el entonces presidente Barack Obama, CAM permite a los padres — y ahora también guardianes legales— a pedir un estatus de refugiado para los niños que demuestran están en peligro en Guatemala, El Salvador y Honduras, donde la violencia y la pobreza están expandidas.
El gobierno de Trump lo cerró a través de una serie de órdenes ejecutivas que restringieron el ingreso de inmigrantes.
Biden ha reiniciado el programa por etapas, que incluyeron también una ampliación en junio de los requisitos de aquellas personas que pueden solicitar reunirse con sus hijos a través de este programa de admisión de refugiados.
Ahora, además de los padres, pueden presentar las solicitudes los guardianes legales de niños que ya viven en Estados Unidos.
Al realizar el anuncio, los funcionarios dijeron que el objetivo del gobierno es atender los desafíos de la migración irregular a través de América Central y allanar el camino para una inmigración legal.
A partir del martes podrán iniciar el proceso de reunificación familiar los padres o custodios legales de los menores siempre que estén en Estados Unidos y tengan algún tipo de estatus legal, incluyendo aquellos que tienen residencia, están en proceso de asilo, tienen un estatus de protección temporal conocido como TPS, o una orden que ha frenado provisionalmente sus deportaciones, dijeron los funcionarios bajo condición de mantener su nombre en el anonimato, siguiendo la política de la Casa Blanca.
Los menores no podrán presentar las solicitudes en Centroamérica, pero sí alertar a sus padres para que lo hagan en Estados Unidos.
El proceso de solicitud deberá realizarse a través de agencias que se encargan de reasentar a refugiados, dijeron los funcionarios.
Se cree que decenas de miles de personas podrían reunir las condiciones para presentar las solicitudes, aunque no se sabe con exactitud cuántos tendrían hijos en Centroamérica o cuántos lo harían.
AP