El Barcelona recuperó la sonrisa en Sevilla. La ciudad maldita, aquella en la que había perdido las tres últimas finales que disputó (la última hace exactamente tres meses), fue este 17 de abril talismán para un equipo que pasó por encima del mismo Athletic que en enero le derrotó en la Supercopa y le regaló a Joan Laporta la primera gran alegría desde que llegó a la presidencia del club.
De esta manera el Barcelona alzó su primer título de la temporada al imponerse 4-0 este sábado en Sevilla y con doblete de Lionel Messi al Athletic de Bilbao, que vio escaparse el trofeo por segunda vez en los últimos quince días.
Antoine Griezmann abrió el marcador (60), Frenkie de Jong puso el 2-0 (63) y Messi cerró la cuenta (68, 71) para dar al Barcelona su 31ª Copa del Rey, que le afianza como el claro dominador en el palmarés de esta competición.
El trofeo supone toda una inyección de moral para el equipo azulgrana, tras el varapalo de la derrota el pasado fin de semana en el Clásico contra el Real Madrid el pasado fin de semana, y le permite soñar con el doblete Copa-Liga.
Este titulo le fuerzas al Barcelona para enfrentar la reta final de la temporada aspirando al titulo y quizás si lo consiguen puedan retener a Leonel Messi.