POR MARCOS SANTOS.- Desde hace varios meses, se ha estado hablando de una eventual alianza en el ámbito senatorial y municipal entre el PLD y la Fuerza del Pueblo de cara a las elecciones del 2024, lo que a nuestro entender a frenado el activismo entre los dirigentes que podrían aspirar en esos niveles de elección a lo interno de esas organizaciones políticas.
Sin embargo, en la semana que acaba de transcurrir, sucedieron algunos hechos que alejan las posibilidades de esa eventual alianza entre las dos principales fuerzas opositoras al gobierno que encabeza el presidente Luis Abinader.
Pero ese será tema para otro artículo.
En la provincia Duarte y en otras partes del país, ni el PLD, ni la Fuerza del Pueblo, pueden ni siquiera exhibir un precandidato a senador, lo que podría interpretarse como un debilidad de ambos partidos ante el electorado.
Igualmente, pasa con las alcaldías de muchos municipios de la República Dominicana.
En San Francisco de Macorís, a lo interno del PLD, solamente el presidente municipal y profesional de la construcción, Enrique Rosario, ha dejado entrever que aspira ser el candidato a dirigir los destinos del cabildo local para el periodo 2024-2028.
Rosario, un reconocido deportista y miembro de la directiva nacional del Codia, se ha visto activo en las últimas semanas, con presencia en los medios de comunicación, vallas publicitarias, y en las labores propias de su presidencia del partido morado.
Por su lado, el partido que lidera Leonel Fernández, en lo que respecta al nivel municipal, dos miembros del partido opositor manifiestan abiertamente sus deseos de convertirse en el próximo alcalde de la ciudad de San Francisco de Macorís, y son ellos el ingeniero Joaquín Peña Agramonte y Rafael Díaz mejor conocido como “Juan Bosch”.
En el nivel congresual, sobre todo a nivel de precandidatos a diputados, es donde estas organizaciones exhiben su mayor dinamismo.
En el PLD en la provincia Duarte, Yenrry Acosta, Mildred Sánchez, Finí Acosta, Miledys Núñez, Juan Victorio, y se dice que Lupe Núñez, quien buscaría su cuarta reelección consecutiva, son los miembros que estarían buscado presentarse en la boleta como candidatos a diputado por esta demarcación.
Por su parte, en la Fuerza del Pueblo solamente se conocen las aspiraciones de Juan Manuel Rosario, Emmanuel Trinidad y Alejandro Romano, como aspirantes a diputados por la provincia Duarte.
Viendo así las cosas, ambas entidades políticas deben de apurar el paso para armar sus propias boletas congresuales y municipales para los procesos del año venidero.
El tiempo apremia para el PLD y la Fuerza del Pueblo.
Soy de opinión que ambos deben alentar a sus miembros para que arrecien el activismo, y con ello estarían dinamizando sus respectivas militancias.
Incluso, pueden intentar convencer a figuras extra partidos para presentarlo como candidatos para el próximo torneo electoral.
Vamos a estar claro en algo, un partido sin precandidatos, es un partido que demuestra ser débil.
Fíjense en el PRM, que tiene varios precandidatos a la alcaldía, diputados y regidores, lo que trae como resultado un innegable dinamismo en el partido oficial.
Verdes y morados apuren el paso, porque de lo contrario bien puede el PRM propinarle una contundente derrota en febrero y mayo del 2024.