POR VINICIO CASTILLO SEMAN.- El Partido Revolucionario Moderno (PRM) cumple 10 años de existencia. Sin duda, siendo un partido joven surgido después de la división con el PRD, ha logrado mucho éxito desde el punto de vista político. Ha ganado las últimas dos elecciones, la última en mayo con un voto popular que le permitió lograr mayoría calificada de 2/3 partes en ambas Cámaras, lo que no había logrado ni el PLD, ni el PRD ni el PRSC, en las últimas décadas.
Al cumplirse el décimo aniversario del PRM es importante resaltar y no olvidar que dos de sus hombres fundamentales, Andrés Bautista y Chú Vásquez, jugaron un papel clave desde su nacimiento, ostentando la presidencia y secretaría general del PRM. Fueron efectivos árbitros entre la competencia que se produjo para el año 2016 entre los seguidores de expresidente Hipólito Mejía y el hoy Pte. Abinader, quienes pusieron el interés de la unidad partidaria y armonía entre ellos, como una premisa indispensable para desplazar al PLD en ese momento en el gobierno.
En el año 2020 al PRM se le presentó una coyuntura histórica que les ayudó a ganar las elecciones en primera vuelta. La división del otrora poderoso PLD, provocada por Danilo Medina al arrebatarle con malas artes la candidatura presidencial a Leonel Fernández, en unas primarias abiertas, motivó la división morada y selló su salida del poder.
El PRM bajo el liderazgo del Pte. Abinader articuló un frente inteligente con el Dr. Leonel Fernández y partidos aliados para evitarle una dictadura al país tipo Venezuela, que pretendió Danilo Medina al tratar por segunda vez de modificar la Constitución para imponer la reelección indefinida.
En la coyuntura actual, si bien el PRM es el partido dominante que concentra todo el poder político, no menos cierto es que acudirá al 2028 sin su principal activo electoral, Luis Abinader, frente a un Leonel Fernández que obtuvo casi un 30% sin el apoyo del PLD y que todo indica será la principal opción opositora al PRM en el 2028, y tras el cual creo se irá el 90% de la militancia que aún queda en el partido morado. Para el PRM será clave mantener su unidad interna, escoger una opción atractiva al electorado que los unifique, fortalecer la gran coalición de partidos aliados que le acompañó en el pasado proceso electoral y, sobre todo, aunar esfuerzos para que el Pte. Abinader pueda sortear con éxito los desafíos de los próximos años de su segundo período.
Creo que el PRM gobernante tiene que reflexionar como partido acerca del mayor problema que tiene el país hoy: la masiva invasión haitiana. Ellos tienen el poder para aprobar acciones y leyes que frenen y reviertan ese proceso. De ello, en mi opinión dependerá mucho su suerte electoral del ´28 y el legado histórico que pueda dejar el Pte. Abinader.
El ascenso al poder del Pte. Trump en EU, le ofrece una oportunidad geopolítica al PRM gobernante para marcharle de frente al problema de la masiva invasión haitiana, física y de vientres.