POR NARCISO ISA CONDE.- Hace años dijimos que ese juicio sobre los sobornos de ODEBRECHT era una farsa que había sido previamente amañada. Las juezas que dictaron sentencias a Rondón (8 años) y Díaz Rúa) 5 años siguieron el libreto.
Previamente el Presidente Danilo Medina y Jean Alain dejaron fuera a Punta Catalina (casi 2000 millones de dólares de de sobre-valuación), los nombres de los sobornados en ese proyecto, los consorciados que se beneficiaron de la estafa ( incluido Manuel Estrella), la otras obras sobrevaluadas con la complicidad de Hipólito, Leonel y el propio Danilo Danilo, las financiaciones electorales.
Luego de instrumentada la farsa judicial sacaron del expediente a 8 de los 14 encartados, todos danilistas.
Ahora liberaron a 4 más, ninguno inocente.
No valió el esfuerzo de la Procuraduría General de la República-PGR encabezada por la magistrada Miriam Germán, que debería ahora abrir el caso Punta Catalina y otras vertientes del proceso, dado que los sobornos, vía Rondón, es “pecata minuta” frente al resto de la estafa.
Estamos frente a una burla indignante que confirma que el sistema de justicia es una basura.
Que la corrupción y la impunidad son males sistémicos, que para arrancarlo de raíz hay que reemplazar esta institucionalidad podrida y cambiar la Constitución y las leyes a través de un PROCESO CONSTITUYENTE, que posibilite crear un poder e instituciones divorciadas de las mafias empresariales, policiales, militares y partidista