Tres de los mayores museos de Nueva York subieron sus boletos para una visita diaria hasta los 30 dólares por persona, el último de ellos esta misma semana, convirtiéndose así en los más caros del mundo.
El último en hacerlo fue el museo Guggenheim, que subió las tarifas por primera vez desde 2015 aduciendo «persistentes tensiones financieras causadas por la pandemia», según declaraciones de un responsable a The New York Times.
Hace dos semanas, fue el Whitney Museum, que como el Guggenheim está especializado en arte contemporáneo, el que también subió de 25 a 30 dólares la entrada.
Antes que ellos, el MET Museum, que es uno de los más visitados en Estados Unidos, elevó los precios al mismo rango en julio de 2022 -también de 25 a 30-, aunque en su caso mantiene la política de «Paga cuanto quieras» para los que puedan probar con un documento que son residentes en Nueva York o la vecina Nueva Jersey.
La tarifa del Museo Americano de Historia Natural, famoso por sus colecciones de fósiles y dinosaurios, está ya muy cerca, en 28 dólares, aunque también ofrece pagos voluntarios a los residentes en Nueva York, mientras que el último de los «grandes», el Museo de Arte Moderno (MoMA), se mantiene en los 25 dólares.
El portal especializado Artnews.com destaca que con estos precios los museos neoyorquinos están entre los más caros del mundo, ya que otros grandes museos tienen tarifas bastante más reducidas, como es el caso del Louvre (París) y el Prado (Madrid), ambos en 15 euros (16,5 dólares al cambio de hoy).