SANTO DOMINGO.- El año 2021 terminó con una tragedia en dos familias. Un hombre no solo terminó con la vida de su expareja, Magalys de la Cruz de los Ángeles, también arremetió a machetazos contra los esposos Juana Marte, de 57 años, y Anastacio de la Cruz, de 62, en el municipio de Yamasá, en Puerto Plata. Historias parecidas volvieron a repetirse con frecuencia en este 2022, con cuatro casos de feminicidios ampliados.
Según datos de la Procuraduría General de la República y publicaciones de los medios que se hacen eco de la violencia contra la mujer, de enero a noviembre han muerto 50 mujeres, cuatro de ellas también víctimas de los verdugos que llegaron a sus casas a exterminar a sus parientes.
El más reciente de estos hechos ocurrió en el sector Los Coquitos, del municipio de Los Alcarrizos, en Santo Domingo, y corresponde al cabo de la Policía Esteban Javier Cora, de 32 años, que el 21 de agosto mató a Paola de la Cruz, de 24 años y expareja; a María Nelly del Rosario, exsuegra; a su excuñada Indiana de la Cruz y a Liren Méndez Báez, el hombre que lo persiguió tras acabar con la vida de las mujeres.
Basilia Tejeda Montero, la abuela y madre de las tres mujeres víctimas, dijo que Cora fue ebrio a buscar en un motor a los dos hijos que procreó con Paola, quien no quiso entregárselos por el riesgo que implicaba para los menores.
Paola habría amenazado a Cora con llamar a la Policía, lo que provocó que este se enfureciera y sacara su arma y disparara contra ella, su madre y su hermana que intervinieron. El joven, que también era agente de la Dirección General de Tránsito Terrestre (Digesett), hirió a uno de sus dos niños, de cuatro años.
En Puerto Plata y Santo Domingo Este
A principio de año, específicamente en abril, Wandy Hernández (el Viejo) ultimó a su pareja Yelissa Paulino Corona, de 23 años, y a su suegra, Ivelise Corona Martínez, de 41, durante una pelea entre la pareja en Sosúa, Puerto Plata.
También, en ese mismo mes, Ricardo Antonio Leonor Abreu le quitó la vida a Reina Margarita Pérez, de 73 años, madre de su expareja Raquelita Guerra e hirió al hijo de ésta, de 19 años, quien sobrevivió de milagro. El suceso ocurrió en Santo Domingo Este.
El 12 de febrero, el también miembro de la Policía, el sargento Anthony Euddy Reyes Cáceres ultimó a su esposa Elizabeth Lantigua, de 35 años, de cinco balazos; hirió a su suegra Seferina Pascual, de 71 años, y se suicidó en el ensanche Alma Rosa II, de Santo Domingo Este. Elizabeth dejó en la orfandad cuatro niños. Las cifras de este año de niños sin madres, como secuelas de los feminicidios, no se han reportado. El año pasado, 78 niños quedaron huérfanos.
Susi Pola: Deben ser estudiados
Susi Pola, investigadora por más de 40 años de la violencia contra la mujer, considera que los feminicidios ampliados deben ser estudiados y que se deben modificar las políticas de prevención, ejecutando cambios. Asegura que en República Dominicana solo se han modificado las leyes, no así las políticas educativas y de salud a favor de la mujer. Entiende también que, “cuando se hace una investigación es para cambiar, y en las políticas públicas en el país no hay cambio”. Pola sostiene, además, que las estadísticas que se ofrecen cada año “no son confiables” porque, según explica, no tenemos un registro “a partir de indicadores que puedan develar todas las muertes de mujeres porque solo hay una referencia de la Procuraduría que cita solo las muertes únicamente en el ámbito de una relación de pareja, doméstica e interfamiliar”. Sostiene que las mujeres que aparecen muertas y aquellas víctimas en peleas en donde interviene el perfil machista, son también feminicidios que hay que sumarlos. “Desde el 2017 para acá ha habido una disminución drástica de feminicidios que no tienen ninguna explicación que no sea que no se están registrando”, asegura Pola durante una entrevista con Diario Libre.
MARISOL AQUINO