SANTO DOMINGO.- La calificadora Fitch Ratings, en su reunión de revisión de decisión de crédito de diciembre, mejoró la perspectiva del Banco de Reservas de negativa a estable, manteniendo la calificación en ‘BB-’.
La decisión se fundamentó en dos aspectos, el primero de los cuales consistió en los factores internos de la institución financiera, su fuerte posición competitiva en el mercado y el perfil de negocios de la entidad como el mayor banco del país y líder en los segmentos Comercial y Consumo. Otros aspectos tomados en cuenta por Fitch fueron las altas concentraciones de activos de Banreservas y la menor ponderación de riesgo en este renglón.
“La calidad de los activos de Banreservas mejoró recientemente, reflejando un mejor desempeño de los segmentos comercial y de consumo”, concluyó. Añadió que también hubo una mejora en la expansión de la cartera crediticia, la cual está respaldada por una sólida cobertura de reservas para insolvencias, de 506.1%. “Fitch cree que la rentabilidad del banco seguirá siendo acorde con su calificación en 2022, ya que el impacto de las provisiones ya ha sido absorbido; La utilidad operativa sobre activos promedio totales mejoró a 2.6% al 3T21 (tercer trimestre del 2021), debido a menores costos de crédito e ingresos extraordinarios por intermediación”, sostuvo en un comunicado la firma calificadora.
En el transcurso del 2021, el Banco de Reservas ha sido reconocido por diversas publicaciones internacionales como The Banker, Euromoney, Global Finance y World Finance, que lo han declarado Banco del Año en República Dominicana en distintos renglones, que comprenden varios aspectos, que incluyen su respaldo a los distintos sectores sociales con la adopción de políticas para reducir el impacto causado por la pandemia del Covid 19. Durante la actual gestión también se destaca el interés de Banreservas de apoyar a cuatro sectores considerados fundamentales para el desarrollo de la economía nacional, como son el turismo, la construcción, las pymes y las zonas francas, sin descuidar otras áreas tradicionales, entre las que figuran el comercio, la industria y la agropecuaria, que son determinantes en la creación de empleos.