POR MARCOS SANTOS. – Sin dudas formaron una mutual muy poderosa políticamente hablando en las elecciones del 2016, cuando Franklin Romero era candidato a diputado por la Provincia Duarte y Alex Díaz aspiraba a la alcaldía de San Francisco de Macorís, ambos postulados por el Partido Revolucionario Moderno, PRM, y desbancaron al poderoso Partido de la Liberación Dominicana, PLD, en esos comicios.
En esa ocasión, 2016, no arrasaron con la senaduría por la tacañería del entonces candidato Siquió Ng, quien era el candidato del hoy partido de gobierno.
Durante la gestión de Alex al frente del ayuntamiento municipal, se notó a leguas diferencias y contradicciones entre el hoy senador y el también comunicador.
Hoy, con el PRM en el Poder, esas contradicciones son más notorias.
Alex Díaz no disimula, no guarda las apariencias.
Quiere destruir, políticamente hablando, al senador Franklin Romero.
Y eso está muy claro, muy evidente.
Alex no tiene funciones en el Gobierno, pero tiene muchas influencias.
Franklin, es un senador de la República, un líder político, carismático, cercano a la gente, humano, solidario, todo un fenómeno en el ámbito político.
Alex, también tiene su swing, como se dice en el argot popular.
Llegó a la sindicatura en el 2016 con alta popularidad.
Sin embargo, esa popularidad fue menguada durante su gestión.
Su lejanía con importantes figuras del PRM, contribuyó a que una parte de la militancia de esa organización política no se sintiera parte de su gestión.
Muchas de las medidas, necesarias por el bien de la ciudad, pero rechazadas por sectores del comercio, generaron muchas críticas al ex alcalde, y, por tanto, su gobierno local se vio enfrentado a esos sectores que siempre se despachaban a sus anchas en administraciones anteriores.
La privatización de la recogida de basura, fue otro de los puntos que produjeron controversia en el mandato de Alex.
Pero volviendo a lo de hoy.
Muchos se preguntan por qué Alex Díaz le “entra” a través de su visto programa de televisión al senador Franklin Romero.
Los señalamientos de Alex, van al plano personal.
He escuchado que el ex alcalde quiere ser candidato a senador en el 24.
Cualquiera que sea la razón o los motivos, esa no es la forma.
Ojalá y esto no afecte las ejecutorias del Gobierno en la Provincia Duarte.
Al no tener funciones oficiales, se podría ver a Alex invadir el espacio institucional que le corresponde al senador Franklin Romero, y eso puede ser peligroso para el PRM.
Esto es simple, el pueblo votó mayoritariamente por la propuesta y la figura de Franklin Romero, para que fuera Senador de la República en representación de la Provincia Duarte, y es a él que le corresponde, junto a la gobernadora Xiomara Cortes, gestionar las obras que el presidente Abinader y ellos mismos, prometieron en la pasada campaña electoral de cara a las elecciones del 2020.
Si Franklin Romero no cumple, no se preocupen tanto, que será los mismos que votaron por él quienes lo echaran del Senado de la República.
Para eso faltan dos años y unos pocos meses.
Recuerden que la Ley establece que los candidatos se escogen el octubre del 2023.
¿Se oye o no se oye?
