El Barcelona cayó 2-1 con el Granada en el Camp Nou y se privó de quedar como único líder de la liga española. Lionel Messi abrió la cuenta para el dueño de casa mientras que Darwin Machís y Jorge Molina torcieron la historia a favor de la visita, que registró la primera victoria en casa de los culés. Con este resultado los catalanes no pudieron tomar la punta en soledad y quedaron dos unidades por debajo del líder Atlético Madrid, en la misma línea que el Real, a falta de cinco fechas para el final.
Si bien el dominio del Barça no fue apabullante en la primera mitad, sí le sirvió para inclinar la balanza a su favor. Como de costumbre, Lionel Messi fue quien rompió el cero después de una buena combinación con Antoine Griezmann, quien lo asistió con ojos en la espalda antes de su remate certero al segundo palo. Un rato antes el argentino había habilitado al francés, que avisó con un tiro que murió en las manos del arquero rival.
La Pulga tuvo el segundo luego de un gran pase largo de Sergio Busquets: Leo mató la bola en el aire a la carrera y se fue mano a mano con Aarón Escandell, que llegó a desviar el remate con borde interno que buscó el segundo palo. La visita hizo muy poco en la ofensiva y prácticamente no inquietó a Ter Stegen en la etapa inicial.
Ya en el complemento los de Koeman pudieron ampliar la diferencia con dos ocasiones claras: al minuto Griezmann ensayó un derechazo tras un giro sobre su propio eje (lo había asistido Moriba) pero la pelota no agarró el efecto suficiente para clavarse en el ángulo más lejano; al rato Messi abrió para De Jong, quien centró como puntero izquierdo y halló a un Sergi Roberto que le dio de volea desviado.
El Granada ni siquiera merodeaba por el área de su oponente hasta que encontró las líneas abiertas y a un dormido Mingueza, que no logró interceptar un pase profundo que derivó en el control y definición certera del venezolano Darwin Machís, que madrugó a Sergi Roberto y no perdonó a Ter Stegen. Baldazo de agua fría en el Camp Nou, aunque eso no sería todo.
Tal fue el nerviosismo de los blaugranas que Koeman protestó desmedidamente una acción al árbitro y se fue expulsado. Hasta allí, el Barça seguía dependiendo de sí mismo para ser campeón porque quedaba a un punto del Atlético, al que recibirá en la fecha 35. Sin embargo al minuto 78 Jorge Molina, ubicado entre los centrales rivales Piqué y Umtiti, conectó de cabeza un centro desde la izquierda e inclinó la balanza a favor de los suyos.
Los Rojiblancos armaron un cerrojo defensivo magnífico que impidió que el asedio del Barcelona se transformara en peligro. ¿Hablar de merecimientos? De poco importa con el tanteador fijado. El elenco que venía de ser eliminado por el Manchester United en la Europa League selló así su primer triunfo en el Camp Nou después de haber sido derrotado en sus anteriores 27 presentaciones. Por su parte, los catalanes detuvieron su brillante andar: arrastraban 15 victorias sobre 17 duelos.
A muy poco le sabrá a Messi mantenerse como máximo artillero del certamen español (lleva 26 gritos y le lleva cinco de diferencia a Karim Benzema) porque el rosarino apunta a conquistar el segundo título de la temporada con su equipo, que ya alzó la Copa del Rey, mientras define su continuidad en la institución.
El desenlace será cabeza a cabeza: el Atlético Madrid lidera pero Real Madrid, Barcelona y Sevilla le respiran en la nueca. No hay margen de error para ninguno de los implicados en esta pelea.