PUNTA CANA.- Haití ejecutó un operativo de repatriación de 720 de sus compatriotas que residían en distintas barriadas de Verón-Punta Cana, en el cual fue asistido por autoridades dominicanas.
La repatriación voluntaria se produjo después que el gobierno dispuso la demolición de las viviendas, sin importar que sean propiedades donde residían familias dominicanas, algunas de las cuales exhibieron sus documentos de propiedad.
Las acciones fueron realizadas sin previo aviso, razón por la que muchos perdieron todos los ajuares de sus hogares, motocicletas y prendas como dinero y de vestir.
De acuerdo con el pastor protestante Wilson Chal, los haitianos acostumbraban guardar su dinero debajo de colchones, toda vez que por carecer de documentación de identidad se les prohibía abrir cuentas bancarias.
DE LOS MONTES A LOS AUTOBUSES
Los extranjeros, que en su mayoría se habían refugiado en zonas escabrosas, llanuras, montañas y quebradas para huir del acoso de los agentes migratorios dominicanos, disfrutaron de un ambiente distendido que les permitió movilizarse hacia los distintos lugares donde fueron acampados para ser luego montados en autobuses confortables.
En los barrios Villa Plywood y El Hoyo de Friusa se congregó la mayoría de haitianos donde, además, llegaron los vehículos. Al final, los candidatos a ser repatriados de manera voluntaria fueron llevados en los autobuses a El Hoyo de Friusa, desde donde se dirigieron al Bulevar del Este para, en caravana, emprender la ruta hacia los distintos accesos regulares de la franja limítrofe.
EL CONSUL A LA CABEZA
El cónsul haitiano en Higüey, Wencesclass Lambert, coordinó in situ los pormenores hasta despedir los nueve autobuses en el Bulevar del Este hacia la frontera con Dajabón, Comendador y Pedernales.
Lambert, de profesión cardiólogo, llenó los formularios de registro que sus compatriotas llevaron consigo durante la travesía, lo mismo que los documentos colocados en la parte derecha de los cristales delanteros de los vehículos.
De igual manera, el operativo contó con el apoyo de la Fundación Zilé por vía del exembajador Edwin Paraison y del doctor Joseph Cherubin y su equipo del Movimiento Social para el Trabajo Socio Cultural y Ambiental (Mostha)
CON MIGRACION
Un oficial de la Policía al servicio de la Dirección General de Migración (DGM) informó a condición del anonimato, que más de 300 agentes fueron inmovilizados para facilitar el proceso en favor de los haitianos en condición migratoria irregular.
De igual manera, una unidad fue colocada al frente de los autobuses repletos de los extranjeros para evitar que en camino sean objeto de percance alguno con las autoridades y puedan llegar a sus destinos de manera segura, sin contratiempo alguno.