El expresidente de la República, Hipólito Mejía (2000-2004), manifestó que a pesar de tener “razones” para haber sometido a la justicia a un expresidente y otros funcionarios, no lo hizo porque no cree en la retaliación con los mandatarios.
Dijo que le advirtió “a los americanos” que lo vivido en países como Colombia, Perú, y algunos de Centroamérica iba a traer problemas. “Yo no iba a aplicar esa fórmula aquí, yo respeté mis presidentes, los respeté a todos, aunque fueran mis contrarios, enemigos no son pero fueron mis contrarios incluyendo a Leonelito… ahí estaba Diandino, el otro Feliz, el otro Feliz, muchísimos… y yo dije que no me metan retaliación que no voy a retaliar con los presidentes”, dijo Mejía.
“Si me quieren condenar de eso que me condenen, pero yo soy enemigo de la retaliación. No solo con los presidentes, a veces con la gente que han tenido posiciones importantes, con los guardias… una serie de vainas, yo soy un enemigo de eso. Y lo apliqué, bien o mal, lo apliqué. Y no tengo el mea culpa de que yo irrespeté a Bosch a Bala… no, eso yo no lo he hecho, ni pienso hacerlo en ninguna actividad de mi vida”, dijo el expresidente.
Al preguntarle si el ministerio público podría someter a un presidente por corrupción, dijo que “deben tener privilegios porque hay que respetar a los presidentes”.
Mejía explicó que en el caso de Leonel Fernández, quien fue su antecesor en su primer año en el poder (1996-2000), recibió muchas críticas, ya que se negó a que se abriera un proceso judicial contra el exmandatario porque es contrario a la retaliación, incluso con funcionarios.
“A mí no me gusta, no. Yo soy enemigo de la retaliación, no solamente con los presidentes, a veces con la gente que han tenido posiciones importantes, con los guardias. Yo creo que sí, hay que tener privilegios… es una convicción muy personal que yo la apliqué”, declaró.
Mejía fue entrevistado al participar en la celebración del aniversario del Tribunal Superior Electoral.