De acuerdo con un panel de escritores de la MLB, el jardinero dominicano los Mets de Nueva York, Juan Soto, fue elegido como el principal candidato para ganar el premio de Jugador Más Valioso de la Liga Nacional para la próxima campaña.
Detrás del toletero quisqueyano, fueron considerados: Shohei Ohtani de los Dodgers de Los Ángeles (2), Kyle Tucker de los Cachorros de Chicago (3), el boricua compañero de Soto en los Mets, Francisco Lindor (4) y el criollo Elly de la Cruz de los Rojos de Cincinatti.
Soto está catalogado como el mejor bateador de todo el béisbol, y el hecho de haber firmado el contrato más grande en la historia de los deportes profesionales o haberse movido a un nuevo equipo, pudieran ser razones motivacionales para tener un gran año en MLB, pero de acuerdo con los expertos, él simplemente confirmará que es el mejor bateador del negocio.
El porcentaje de embasarse de su carrera es de .421, el del año pasado fue .419 y para la venidera campaña se espera que vuelva a estar por encima de los .400, así como también se proyecta que conecte más de 25 cuadrangulares y tome al menos 125 bases por bolas.
Ese combo de 25 tetrabases y 125 boletos o más, lo ha logrado en cuatro temporadas consecutivas, la cuarta mejor marca en cuanto a esa combinación, sólo superada por Barry Bonds (10), Babe Ruth (10), y Ted Williams (8), y como las temporadas de Soto siempre andan rondando la excelencia, los entendidos estiman que esta será la temporada en la que finalmente obtendrá el Galardón.
Juan Soto subió a Grandes Ligas en 2018, y al año siguiente apareció en el noveno lugar de la votación al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, en 2020 finalizó en quinto puesto, en 2021 quedó segundo detrás de Bryce Harper, en 2023 bajó a la sexta ubicación, y el año pasado fue tercero en la elección correspondiente a la Liga Americana.
Los demás candidatos
En cuanto al actual defensor del premio, el jugador de dos vías, Shohei Ohtani, los escritores de MLB.com anticipan que será grandioso volverlo a ver tras su temporada de 50 jonrones y 50 bases robadas, además de que los Dodgers planean que retorne al montículo, en algún momento de la temporada, ya que continúan las precauciones en torno a la recuperación de cirugías y procedimientos a los que se ha sometido.
De mantener la salud, así como volver a poner números impresionantes como ya es costumbre en él, las posibilidades son amplias de que Ohtani gane un tercer MVP seguido, y el cuarto de su carrera.
Mientras que el jardinero de los Cubs, Kyle Tucker, viene de ser uno de los jugadores ofensivos más consistentes en los últimos cuatro años, ya que acumula un bWAR de 21.2 (el «bWAR es una estadística sabermétrica de baseball-reference.com que contempla el bateo, corrido de bases, fildeo y carreras posicionales ajustadas, carreras ganadas o perdidas por batazos para doble matanza entre otros) así como un OPS+145 y ha mejorado mucho su disciplina en el plato.
El caso de Francisco Lindor, es bastante especial, ya que tuvo un 2024 de 33 jonrones, un OPS de .844 y un WAR de 6.9, pero fue en la segunda mitad de la campaña en donde mostró lo que es capaz de hacer a favor de su equipo, ya que a partir del primero de agosto elevó su .OPS a .956, acarreando sobre sus hombros a los Mets para llevarlos a la postemporada.
En sus cuatro años con los Mets, en los que se ha caracterizado entre otras cosas por su impecable defensa y sus palos a la hora buena, Lindor siempre está en la bases, como lo demuestra el hecho de que su OPS ha ido aumentando a ritmo de un 37% cada año que ha estado con los Metropolitanos, lo que hace suponer que al final del 2025 volverá a estar por encima de .800 o superior.
La temporada de Elly de la Cruz el año pasado, quedó en los anales de la historia del juego como una de las mejores ya que fue apenas la quinta desde el año 1900 en la que un jugador pudo colectar más de veinte jonrones (25), y más de 60 bases robadas (67), en una misma campaña.
Su problema siempre han sido los ponches, ya que por esa vía fue puesto out el 31% de las veces que fue a batear, algo que ya en el Spring Training de este año ha visto reducir aunque sea en los partidos de práctica, lo que promete bastante si se tiene en cuenta que De La Cruz estará en apenas su tercera temporada en Grandes Ligas y con sólo 23 años de edad.