SANTO DOMINGO.- Cuando se piensa en prisiones casi siempre viene a la mente un lugar diseñado para castigar a los que han faltado a la ley, donde la gente cumple la terrible pena de perder la libertad.
Las prisiones son espacios pensados para que sus ocupantes se olviden de todo el disfrute que la vida ofrece, como ocurre con los presos que guardan prisión en la Penitenciaría Nacional de La Victoria, quienes se encuentran bajo hacinamiento por ser la más poblada del país.
Sin embargo, los internos que guardan prisión en ese recinto carcelario serán llevados a principio de agosto, a su nuevo hogar, parecido a un hotel de cinco estrellas, el cual albergara unos 8,788 privados de libertad, la mayor cantidad del país.
Se trata del Centro de Corrección y Rehabilitación Nueva Victoria, un complejo penitenciario de 12 módulos, ubicado en el sector Las Parras, municipio de Guerra, provincia Santo Domingo, obra que está bajo la responsabilidad de la ingeniera Jenny Marte y que se construye en un terreno de aproximadamente 6,407,083.00 metros.
La Nueva Victoria es la construcción más significativa y de mayor impacto dentro del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario que lleva a cabo la Procuraduría General de la República, con el propósito de terminar con el hacinamiento en las cárceles dominicanas y evitar que estas sean centros de operaciones de la delincuencia.
El procurador general de la República, Jean Rodríguez, asegura que las nuevas cárceles, como La Victoria, el más grande del sistema penitenciario construido con fondos propios y de los indemnizados por Odebrecht y los Super Tucanos, están creadas para que el período de internamiento contribuya a la rehabilitación y reinserción social de los privados de libertad.
Facilidades
La nueva estructura dispondrá de celdas de alojamiento, conyugales, de reflexión y de máxima seguridad, así como con espacios para actividades educativas y talleres de producción agrícola e industrial, producción de peces y miel, y programa de reciclaje, dentro de las terapias ocupacionales y de los programas orientados a la rehabilitación y reinserción social.
Además, contará con áreas médicas, salas de audiencias que permitirán agilizar los procesos judiciales, capillas y templos de congregación para los diferentes cultos religiosos, respetando así la libertad de culto de los internos. También, contará con biblioteca, economatos, así como también con un edificio de comedor, play de sóftbol, canchas de baloncesto y dos gimnasios al aire libre.
Contará con los más altos niveles de seguridad, incluyendo un sistema vigilancia de última generación, con cámaras por circuito cerrado, que garantizarán mayor control y vigilancia de los privados de libertad en ese recinto.
Las labores de vigilancia y administración del moderno complejo penitenciario estarán a cargo de más de 900 Agentes de Vigilancia y Tratamiento Penitenciario (VTP).
Innovaciones
Dentro de las innovaciones que serán implementadas en el recinto, se destaca la captación de los datos biométricos de los internos a través de un moderno sistema, que permitirá identificar con precisión a cada privado de libertad y conocer su ubicación exacta dentro del centro.
En los recintos los internos podrán formarse en educación básica, media y técnica, además de que dispondrán de espacios para talleres donde podrán trabajar y así generar una experiencia que les permita tener una reinserción verdaderamente efectiva.
Las edificaciones de la Nueva Victoria contarán también con un edificio de comedor, gimnasios al aire libre y economatos, entre otros espacios.
REFORMA
Sugerencias de Naciones Unidas
Mandela.
El complejo penitenciario está basado en el respeto de los derechos humanos, el cual fue diseñado tomando en cuenta las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos, llamadas también Reglas de Nelson Mandela.
Individual.
Las reglas mínimas de las Naciones Unidas contempla un tratamiento individualizado a cada interno, desde el momento de su ingreso.