“La Pepca juega a que se venzan las garantías para luego culparme por la pérdida de cientos de millones»

SANTO DOMINGO.- Al exprocurador general de la República Jean Alain Rodríguez no le inquieta la auditoría que la Cámara de Cuentas realiza a la cárcel de La Nueva Victoria. Todo lo contrario. “Soy el primer interesado en que se concluyan esas auditorías”, aseguró Rodríguez.

Tras los motines en la vieja cárcel de La Victoria a mediados de enero pasado, Diario Libre contactó al exprocurador para que hable sobre su Plan de Humanización del Sistema Penitenciario, que incluye un nuevo recinto para los reos de La VictoriaJean Alain Rodríguez es el principal sospechoso en la investigación del Ministerio Público denominada Operación Medusa, y está bajo prisión preventiva en Najayo.

— Además del hacinamiento en La Victoria, ¿qué otra situación se buscaba resolver con el plan de humanización?

El Plan de Humanización del Sistema Penitenciario busca resolver dos grandes problemas que, a su vez, constituyeron sus dos ejes principales: por un lado, el tratamiento digno a los internos, enfocando el sistema a uno orientado a la rehabilitación y reinserción en la sociedad de los privados de libertad.

La Nueva Victoria ha sido una de las iniciativas más emblemáticas del sistema penitenciario, una deuda atrasada que arrastrábamos desde hace más de 70 años, obteniendo las peores calificaciones en materia de derechos humanos y de las reglas internacionales en materia penitenciaria.

El segundo eje buscaba dar respuesta al histórico y lamentable hacinamiento en las cárceles que por más de siete décadas había afectado al sistema. No podíamos hablar de tratamiento efectivo si no contábamos con las condiciones básicas e infraestructura para prestar dicho tratamiento.

Para ello, fueron ampliados ocho de los actuales centros de corrección y rehabilitación existentes bajo el nuevo modelo, de acuerdo con las necesidades que tienen las provincias donde éstos se encuentran. Se ampliaron los centros de Puerto Plata, Elías Piña, Dajabón, Rafey Hombres, San Pedro de Macorís, Najayo Mujeres, Najayo Hombres y Najayo Sancristobalense, encontrándose seis de ellos en operación.

— ¿Cómo garantizaba la seguridad del penal de La Nueva Victoria construida como parte del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario?

Como parte de los elementos de seguridad que fueron adquiridos y entregados nuevos y con sus garantías a la actual gestión puedo citar decenas de kilómetros de fibra óptica que unen los más de 100 edificios del complejo, todos con routers y switches de última generación en cada edificio que sirven para transmitir data, emergencias y otras aplicaciones de seguridad.

También incluye un sistema de comunicación cableado soterrado, un circuito cerrado con cientos de cámaras en todos los edificios y pabellones, cientos de radios inalámbricos de comunicación, detectores de metales y scanners de última generación para evitar el ingreso de sustancias prohibidas, armas y teléfonos.

Por igual, la instalación cuenta con alojamiento para más de 1,000 agentes penitenciarios, unidad antimotines, una estación de bomberos con su camión para ser utilizado no solo contra incendios, sino también para paliar motines, cuenta con un helipuerto y un corredor interno y externo para patrullaje.

Asimismo, por primera vez en el sistema penitenciario se instalaron duchas, lavamanos e inodoros antivandálicos para que los internos no los destruyan ni fabriquen armas blancas con estos aparatos.

Decenas de torres de control, centro de monitoreo con pantallas múltiples, vehículos para patrullaje, incluyendo camionetas, motores saltamontes, 4 buggies todos nuevos, 12 caniles adultos de distintas razas importados desde Colombia ya entrenados en ataque, detección de dinero y drogas con su espacio para alojamiento y entrenamiento. Además de siete verjas y murallas e iluminación especial para todo el complejo, que la convierten en uno de los centros penitenciarios más seguros de la región, sobrepasando con creces los requerimientos de seguridad promedio para un complejo como éste.

De igual manera, la modernización que se planteó es integral en todas sus áreas, pues se duplicaron la cantidad de los agentes, fortaleciendo su formación técnica y dignificando sus salarios en todos los niveles para evitar las malas prácticas que por años se arrastraban de pago de peajes y coimas para obtener privilegios.

— ¿Cuál es su respuesta a las acusaciones de que ese plan fue un “fraude”?

Para mí es un absurdo. Es la mayor imputación de la solicitud de medida de coerción y la que mayor peso atribuye a que hoy en día, yo continúe privado de libertad.

Es un absurdo, pues te cuento: para llevarlo a cabo se realizaron licitaciones de más de 80 obras, publicándose durante más de seis meses conforme lo que ha sido establecido por la ley.

En busca de garantizar la transparencia del proceso, se realizaron licitaciones públicas, procesos que son abiertos, participativos y públicos para todo el interesado.

Durante estos procesos de contrataciones no hubo ni una sola impugnación ni sometimiento judicial al proceso, y adicionalmente, para garantizar la igualdad de oportunidades y la pluralidad de la participación en el sector de la construcción, no fue permitido adjudicar a ninguna persona física o jurídica más de un lote comprendido en el Plan y de esa forma tener más empresas adjudicadas sin monopolio.

A mi salida y bajo la nueva administración que dirige la magistrada Miriam Germán Brito se firmaron 11 adendas para las 11 principales obras, mediante las cuales ratificó todos los contratos que yo firmé, les extendió el tiempo de entrega a unos seis meses adicionales a partir de la firma, por lo que dichas obras debieron ser entregadas y culminadas para marzo del 2021, dos meses antes de que fuera apresado y acusado por supuesto fraude del Plan de Humanización.

Es decir, a la fecha de terminación de las adendas firmadas por la actual procuradora Miriam Germán, que es marzo 2021, hoy la garantía de vicios ocultos aún está vigente, pero la Pepca juega a que se venzan las garantías para luego culparme por la pérdida de cientos de millones, cuando en realidad son ellos los responsables por detener y abandonar las obras sin necesidad.

Esa ratificación de Miriam Germán Brito demuestra que revisó los contratos que yo firmé, que mostró sensibilidad a favor de los privados de libertad y que procuraba poner todas las obras en operación, pero la Pepca se lo ha impedido, para auditar, y deben auditar, no tienen que detener una obra generando millones de pesos en pérdida.

— ¿Por qué no se completó La Nueva Victoria durante su gestión?

Al culminar nuestra gestión el 16 de agosto del 2020 estaba lista en su primera fase y en días estaría lista totalmente. La pandemia del COVID-19 afectó el cronograma de entrega varios meses, pues el cierre obligó a suspender trabajos por precaución.

En ese momento se había asumido un compromiso de parte de los contratistas de entregar las obras en su totalidad en los 30 días siguientes. Sin embargo, la Pepca ordenó detener los trabajos a pesar de que la procuradora Miriam Germán Brito firmó adendas en diciembre del 2020 que comprometían a los contratistas a entregar las obras con ciertas modificaciones en marzo del 2021.

Ahora bien, aún con los retrasos que trajo el cierre por la pandemia del COVID-19, el 10 de agosto del 2020 pudimos entregar al país la primera etapa de esta gran obra del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario, que fue iniciado dos años antes, para que junto a las demás obras ya en operación, nuestros hombres, mujeres y adolescentes en conflicto con la ley, cumplan prisión con dignidad y puedan acceder a programas especiales para su rehabilitación y reinserción a la sociedad de la manera más adecuada posible, considerando que es uno de los medios más idóneos para combatir la criminalidad y la delincuencia en el país.

Es una pena que no se le dé continuidad a los planes de reforma que se iniciaron y que tanto necesita el sistema y el país por interés de venganza, poniendo en riesgo la vida de miles de internos que merecen mejores condiciones y una oportunidad para reinserción.

Hasta los más de 50 letreros de mármol que indicaban que esas obras habían sido realizadas en la gestión 2016-2020 fueron destruidos en todo el territorio nacional en los primeros tres meses de gestión. Un daño al Estado y una verdadera afrenta al erario. Las evidencias están de lo que se entregó y el estado de deterioro y abandono actual en que se encuentran las edificaciones.

— La Nueva Victoria es auditada por la Cámara de Cuentas, ¿le inquieta ese proceso?

El rol de un Procurador General no es auditar ni construir obras, sino planificar, proponer, gerenciar y requerir a cada departamento el cumplimiento de su deber, velando por que estos cumplan con sus responsabilidades. Las auditorías están llamadas a identificar incumplimientos y si fueran identificados incumplimientos, es a los contratistas que les corresponde realizar los reparos, si los hubiere, no siendo esto un acto penal, sino administrativo, que se soluciona exigiendo el fiel cumplimiento a los mismos.

Otro aspecto que puede traer toda auditoría de obras es una sobrevaluación que no creo que exista, ya que ganaron siempre las mejores ofertas técnicas y económicas con empresas de alto prestigio y experiencia que no se prestarían a eso.  

Por todo esto, no solo no me inquieta, sino que soy el primer interesado en que se concluyan esas auditorías y, si se identifican incumplimientos, que soliciten esos reparos a los contratistas antes de que venzan las garantías.

GRACIELA CUEVAS

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