La sexualidad y el paciente con cáncer

La sexualidad es un aspecto central en la vida de los individuos que se desarrolla y se expresa en todas las etapas de la vida.

Cuando le informamos al paciente el diagnostico de un cáncer, dada su connotación cultural, implica para el paciente o la paciente una condición de salud que potencialmente comprometerá su vida, de manera que el impacto psicológico que produce en muchos de los casos es devastador.

Este impacto no es ajeno a la sexualidad, la libido, la conducta hacia las relaciones sexuales, la motivación, etcétera. Pero esto no es todo, ya que, en muchos casos, el cáncer necesita un manejo agresivo que puede incurrir directa o indirectamente en la sexualidad de las personas, ya sea por el tratamiento médico basado en quimioterapia, radioterapia, o cirugía oncológica.

Una de las condiciones secundarias a los tratamientos es la pérdida de la imagen corporal, tales como son las derivaciones urinarias, o digestivas, cuando se extirpa una mama, la amputación de la vagina, la amputación del pene, etcétera.

Cáncer de próstata

Por otra parte, están los problemas funcionales después de cirugías que comprometen la sensibilidad, o la erección. 

En el caso particular del cáncer de próstata prácticamente todos los tratamientos aplicados al paciente, en todas las etapas o grados del cáncer, suelen tener una repercusión negativa en la función sexual. 

La cirugía radical de próstata es la cirugía que mayor condiciona esta afección con tasas que rondan el 45-50% de disfunción eréctil.

Avances

La ciencia en un esfuerzo por mejorar estos efectos secundarios de procedimientos o cirugías que son mandatorios para poder preservar la vida del paciente, ha mejorado mucho, y en la actualidad podemos decir que dentro de las opciones de tratamiento para una de las enfermedades que más afecta la sexualidad en el hombre (cáncer de próstata), tenemos a disposición la última tecnología, para realizar una cirugía más segura, y más precisa, tanto para el paciente, como para el Urólogo Robótico, que es la cirugía radical asistida por Robot Da Vinci.

Más esfuerzo

Es importante decir que con todas las herramientas que tenemos a mano, en muchas ocasiones no es posible una reconstrucción de la sexualidad después de un tratamiento oncológico. Para concluir, creo que debemos aunar esfuerzos para instruir en lo que es el concepto sobre la sexualidad y funcionamiento de la respuesta sexual de hombres y mujeres en los grupos oncológicos, para promover aspectos relacionados a la Sexualidad de pacientes con riesgo de ser sometidos a cirugías mutilantes.

Ante la duda, visite su urólogo.

PABLO MATEO

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