Los Angeles Clippers cerraron su racha de tres derrotas seguidas con una clara victoria ante los Atlanta Hawks (106-93) y con un Serge Ibaka que firmó una muy buena y eficaz actuación saliendo desde el banquillo.
El pívot español consiguió 16 puntos (7 de 8 en tiros, 2 de 3 en triples), 2 rebotes, 2 asistencias y un tapón en 21 minutos para los angelinos.
Ibaka fue el segundo máximo anotador de los Clippers por detrás de un gran Amir Coffey (21 puntos, 5 rebotes y 3 asistencias).
Siete jugadores consiguieron 10 o más puntos en unos Clippers que llegaron a ganar de 19 en el último cuarto.
Aunque todavía echan de menos a Kawhi Leonard y Paul George, los Clippers han recuperado efectivos recientemente -como Ivica Zubac y Nico Batum- y, pese a que los resultados todavía no acompañan del todo, su rotación empieza a ser cada vez más reconocible.
Por su parte, unos Hawks bastante decepcionantes se van de vacío de Los Ángeles tras haber caído también el viernes ante los Lakers (134-118).
Trae Young y Bogdan Bogdanovic, con 19 puntos por cabeza, lideraron al equipo de Atlanta, que solo anotó el 26,9 % de sus triples y que perdió con claridad la batalla del rebote (39 frente a 53 de los Clippers).
COFFEY PIDE PASO
Como si les costara afrontar un partido que se jugó al mediodía de un domingo, los dos equipos se unieron en un pobre 6 de 20 en tiros para un frío arranque del encuentro (5-11 con 7.01 en el reloj).
La finura de Bogdan Bogdanovic destacó con 7 puntos para los Hawks, que además se beneficiaron de la temprana segunda falta de Marcus Morris en los Clippers.
Sin embargo, los angelinos se refugiaron en el acierto desde el perímetro para darle la vuelta al marcador con dos triples de Amir Coffey (10 puntos sin fallo en el primer parcial) y uno más de Nico Batum (22-19 a falta de 2.15).
Serge Ibaka con un triple más apuntaló la reacción de los Clippers, que acabaron por delante el primer cuarto (31-23) con un 5 de 9 en triples frente al deficiente 1 de 7 de los Hawks.
Coffey e Ibaka continuaron con su particular fiesta en el tiro exterior en el segundo cuarto, pero Bogdan Bogdanovic y Kevin Huerter tiraron del carro de los de Atlanta para reducir la diferencia (39-35 a falta de 6.30).
Aunque le costó encontrar su ritmo, Trae Young fue de menos a más en la primera parte (11 puntos con 5 de 13 en tiros), pero el acierto de Coffey (16 puntos con 6 de 7 en intentos) y el peso de Ivica Zubac en el juego interior (8 puntos y 9 rebotes) decantaron la balanza del lado de los locales (59-53).
Young se desperezó en la reanudación buscándose tiros por su cuenta o asistiendo a compañeros como el inspirado Bogdanovic.
No obstante, un sorprendente Coffey volvió todavía hambriento del vestuario y frenó las intenciones de los Hawks (70-63 a falta de 7.10).
También John Collins trató de redimirse en los de Atlanta tras una mala primera parte (solo 1 punto), pero Reggie Jackson y Nico Batum explotaron al contraataque la clara fragilidad de los Hakws en defensa (78-67 con 4.17 por jugarse).
Dos mates prácticamente seguidos de Serge Ibaka y Terance Mann bastaron para que los Clippers sometieran a unos Hawks dispersos y que no encontraban las armas para orquestar una remontada (86-73).
Sin ser capaces de elevar su exigencia defensiva, los Hawks se dejaron llevar por un intercambio de canastas que no inquietaba demasiado a los Clippers (92-82 con 8.20 para el final).
Dos canastas seguidas de un Ibaka muy intenso y efectivo ampliaron la diferencia (96-82 a falta de 7.11).
Sin atisbo de reacción de los visitantes, una canasta acrobática y vistosa de Eric Bledsoe (102-86 con 3.55 en el reloj) cerró el partido sin mayores problemas para los Clippers.
EFE