Los Yanquis lideran el Este de la Americana, la división más reñida

Entre 1998 y 2003, los cinco equipos de la División Este de la Liga Americana culminaron en el mismo orden extacto cada temporada. Por entonces, los Yanquis de Nueva York tenían la supremacía, los Medias Rojas de Boston pretendían desbancarlos y los demás quedaban siempre como perseguidores, un status que imperó por buen tiempo.

Esta es una nueva era.

En las últimas nueve temporadas, cada equipo en la división ha quedado primero al menos una vez. Boston lo logró en tres ocasiones, pero los Medias Rojas también se han hundido cuatro veces en el fondo, incluyendo 2022. Los días cuando el orden de posiciones era fácil de pronosticar han quedado en el pasado.

La pasada campaña terminó con un equipo habitual en la cima — los Yanquis redondearon una foja de 99-63 — pero la puja más abajo deparó emoción. Toronto y Tampa Bay estamparon boletos como comodines, pero tuvieron que sufrir con un equipo de Baltimore que repuntó 31 juegos con respecto a la temporada anterior.

A la pregunta sobre sus expectativas en la división este año, el mánager de los Orioles Brandon Hyde arrancó risas por lo simple — y obviedad — de la respuesta.

“Creo que nuestra división es muy buena. Lo será también el año que viene», dijo Hyde. “Entiendan, nos toca estar en una división durísima. Todos van a estar dando pelea. Fue alentador que pudimos mejorar bastante el año pasado, pasos importantes, el poder competir contra ellos como lo hicimos. Este año no vamos a sorprender a nadie. Ya saben que somos un equipo talentoso y nos entusiasma el desafío de encontrarnos en una división muy difícil”.

¿CÓMO SE VEN?

1. Yanquis. Aaron Judge sigue en Nueva York tras fijar un récord en la Liga Americana con 62 jonrones la pasada temporada, firmando un contrato de 360 millones de dólares por nueve años. También asume la nueva función de capitán de los Bombarderos del Bronx — el primero de la franquicia desde Derek Jeter. Los Yanquis añadieron al estelar zurdo Carlos Rodón para reforzar una rotación comandada por Gerrit Cole. El resto sigue casi intacto del grupo que fue barrido por los Astros en la serie de campeonato de la Americana. Nueva York no alcanza la Serie Mundial desde 2009, su mayor sequía sin ganar el circuito desde su primera conquista en 1921.

2. Rays. Tampa Bay se ha clasificado a la postemporada los últimos cuatro años. Lo consigieron en 2022 pese a las lesiones del torpedero Wander Franco (apenas disputó 83 juegos) y el segunda base Brandon Lowe (65 juegos). El derecho Tyler Glasnow se perdió toda la campaña, y Shane McClanahan quedó sexto en el voto al Cy Young pese a padecer molestias en el hombro. El jardinero Kevin Kiermaier y el receptor Mike Zunino se marcharon, pero los Rays son un equipo que tiene el beneficio de la duda para asimilar tales bajas y mantenerse como protagonistas.

3. Azulejos. Los Azulejos empezaron a los tumbos al extremo que cambiaron de piloto. La marca de 46-28 con John Schneider les bastó para clasificarse a los playoffs con un comodín. Toronto tiene una alineación con los recursos para pelear contra cualquiera, destacándose Vladimir Guerrero Jr., George Springer, Matt Chapman y Bo Bichette. Pero se desprendieron del jardinero Teoscar Hernández en un canje con Seattle. El pitcheo de los Azulejos fue sobresaliente el año pasado. Alek Manoah quedó tercero en la votación del Cy Young y Kevin Gausman también tuvo una excelente temporada, pero Hyun Jin Ryu apenas pudo cumplir seis aperturas por problemas en el antebrazo y José Berríos dio un paso atrás.

4. Medias Rojas. Boston perdieron al torpedero Xander Bogaerts y al toletero J.D. Martínez en la agencia libre, y el infielder Trevor Story se operó el codo. Boston pudo reforzar con las contrataciones del cerrador Kenley Jansen, el infielder Justin Turner y el jardinero Masataka Yoshida. Más importante, quizá, fue que pudieron retener a Rafael Devers, ofreciéndole al tercera base dominicano un jugoso contrato. También calmó a una afición que no perdona las salidas de Mookie Betts y Bogaerts en años recientes. A Boston le vendría bien una temporada sin lesiones de Chris Sale, quien apenas ha lanzado en 11 juegos en los últimos tres años.

5. Orioles. Baltimore podría pelear por un boleto a la postemporada y quedar último. Su invierno fue discreto y resta por ver si esa es una buena estrategia en esta división. El receptor novato Adley Rutschman lideró el resurgimiento en 2022, y otros prospectos tocan la puerta. El infielder Gunnar Henderson debutó al final de la pasada campaña y Grayson Rodríguez podría robustecer la rotación. Habrá que ver cómo responde el bullpen, que de la nada sorprendió para afianzar el repunte. Si retroceden, será más difícil repetir esa prometedora actuación.

NUEVO CALENDARIO

Con un calendario más balanceado este año, los equipos del Este de la Americana se medirán 13 veces entre sí este año, en vez de 19. Si rinden a todo vapor fuera de la división, es previsible que múltiples boletos de comodín se repartan entre estos cinco.

Cada uno de los equipos del Este logró un saldo positivo ante oponentes fuera de la división el año pasado. Incluso Boston, con foja de 26-50 contra sus rivales de división, pero de 52-34 contra el resto.

Sin incluir la postemporada expandida de 2020, el Este de la Americana ha producido 10 comodines en siete campañas desde 2015. Ninguna otra división excede más de seis.

MÁS PROSPECTOS

Aunque los Orioles han acaparado la atención últimamente por su camada de prospectos — tienen a cuatro de los 50 mejores, de acuerdo al ránking de MLB, los otros conjuntos del Este cuentan con prometedoras fichas.

El torpedero Anthony Volpe es el 5to en el ránking y logró abrirse espacio en el roster desde el primer día. El derecho Taj Bradley (20mo) tuvo foja de 7-4 con efectividad de 2.57 en las menores con Tampa Bay en 2022. Y los Medias Rojas hicieron debutar al infielder Triston Casas (23ro) en septiembre.

AP

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