Ron Roenicke no volverá como mánager de los Medias Rojas de Boston, poniéndose fin a un complicado ciclo provisional en el último día de la temporada que fue abreviada por la pandemia.
Los Medias Rojas se hundieron en el fondo de la División del Este de la Liga Americana.
Contratado en la víspera de los entrenamientos de primavera para reemplazar al suspendido Alex Cora, Roenicke asumió el mando de un roster que pronto se desprendería de Mookie Betts, el Jugador Más Valioso de la Liga Americana en 2018 y fue fue enviado a los Dodgers de Los Ángeles junto a David Price, el Cy Young de 2012. El as Chris Sale nunca lanzó con el equipo este año.
“A lo largo de esta complicada temporada, la consistencia y profesionalismo de Ron mantuvo el ambiente del camerino de manera productiva y le permitió a los jugadores tener espacio para crecer y desarrollarse”, dijo el domingo el director de béisbol Chaim Bloom en un comunicado.
“Aunque lo creemos, en el futuro nos beneficiaremos de un nuevo liderazgo y nueva energía. Esto no disminuye nuestro sentir sobre Ron. Es un hombre de gran carácter que se preocupa por sus jugadores y la organización. Como entrenador de banca, ayudó al equipo a ganar un campeonato. Como mánager demostró su aplomo y liderazgo al tocarle navegar un año extremadamente difícil”.
Al reducir su carga salarial con el canje de Betts, los Medias Rojas pudieron quedar debajo del impuesto de lujo, una ventaja para quien reemplace a Roenicke.
Alguien que seguramente generará atención como posible sucesor: Cora, quien dirigió a los Medias Rojas al campeonato de la Serie Mundial en 2018, en su primera temporada como piloto. Boston despidió al puertorriqueño tras ser identificado con el cerebro de una trama de robo de señales en Houston durante el periodo en el que se desempeñó como coach de banc de los Astros. La suspensión de un año que Cora recibió por ese escándalo acabará tras la próxima Serie Mundial.
AP