NUEVA YORK.- El hallazgo de un alijo de fentanilo en una guardería tras la intoxicación de cuatro niños y la muerte de uno de ellos a mediados de septiembre todavía mantiene a la ciudad de Nueva York conmovida, mientras que la madre de dos de las víctimas agradece a Dios el haberle devuelto a sus hijos, al tiempo que pide justicia.
En conversación con Telemundo, Ana Rosa García cuenta entre lágrimas cómo fue el momento en el que encontró inconsciente a uno de sus hijos el pasado 15 de septiembre cuando Grei Méndez, la dominicana dueña de la guardería «Divino Niño», alertó sobre el estado de los cuatro pequeños, con edades entre ocho meses y dos años.
García, madre de Kiara, de ocho meses, y Abel, de dos años, hoy agradece que sus hijos estén vivos, pero el recuerdo de ese 15 de septiembre todavía la hace llorar y le hace díficil continuar con el triste relato.
«Yo corrí para donde mi bebé, estaba negrecito, y yo comencé a llorar y a llamarlo y él no me despertó», contó García sobre el día en el que llegó al centro de cuidado infantil y se dio cuenta de que eran varios los niños que no despertaban, entre ellos sus pequeños.
«Entré, corrí, cogí mi bebé, le di respiración boca a boca, le apreté el pecho», es la secuencia de acciones que recuerda haber hecho la mujer al darse cuenta de la condición de su hijo y que marcaron la diferencia entre la vida y la muerte.
«Gracias Señor por devolverme mi hijo», fueron las palabras que pronunció al darse cuenta que su hijo respondía a sus intentos para no perderlo.
Abel, Kiara y otro niño fueron reanimados después de que se le administrara el fármaco Narcan para revertir las sobredosis, mientras que el niño de un año Nicolás Feliz Dominici, fue declarado muerto tras sufrir un paro cardiaco. Actualmente los hijos de García parecen estar bien, pero se desconocen las consecuencias de este desafortunado evento en su salud y su desarrollo.
«Yo pensando que estaba en un buen lugar y cubriendo basura con mis hijos, con tantos niños inocentes», es el lamento de esta madre que estuvo cerca de perder a sus dos hijos.
«Tiene que hacer justicia»
«Que Dios los perdone y, que Dios y la ley tienen que hacer justicia», es lo que pide Ana Rosa García para los sospechosos involucrados en la muerte e intoxicación de los niños en la guardería, donde las autoridades encontraron un laboratorio de drogas.
Durante el registro al jardín, las autoridades encontraron un paquete que contenía fentanilo con valor de varios miles de dólares. Residuos de la sustancia, 100 veces más potente que la morfina, fueron hallados debajo de una colchoneta en la que los niños dormían.
También se halló una prensa utilizada para combinar la droga con otros narcóticos.
Actualmente hay cuatro sospechosos arrestados por el caso: Grei Méndez De Ventura, de 36 años y propietaria de la guardería; Renny Antonio Parra Paredes, de 38 años; Carlisto Acevedo Brito, de 41, y Félix Herrera García, esposo de la dueña de la guardería.
Los cuatro enfrentan cargos federales relacionados con la distribución de drogas con resultado de muerte.