Obispo apela a que líderes actúen con madurez en diálogo

SANTO DOMINGO.- El obispo de la diócesis de La Altagracia, Jesús Castro Marte, apeló ayer a que el liderazgo nacional actúe con madurez durante el diálogo convocado por el presidente Luis Abinader para introducir una serie de reformas estructurales.

Aunque consideró como “muy antidemocrático” que se reduzca el liderazgo nacional a cuestiones partidarias o políticas y a lo económico, pues dijo que el país no solo es negocios, llamó a los que fueron convocados a participar a no presentar confrontaciones.

“Las circunstancias actuales no están para confrontaciones, sino para la concertación, pues hemos sido golpeados por la pandemia de la covid-19 que ha provocado una crisis económica y social sin precedentes, por lo que la República Dominicana nos necesita a todos para encaminarla por la vía del progreso”, indicó el monseñor en un comunicado.

Colocar obstáculos es irresponsable

Aseguró que liderar es ser servicial, concertador y tener apertura al futuro.

El prelado manifestó que colocar obstáculos a la solución de los problemas que afectan el país apostando al fracaso de la administración actual, sería un acto irresponsable de quienes los llevasen a cabo.

“Sin embargo, somos conscientes, de que se mueven grandes intereses económicos y políticos que podrían generar ciertos tranque”, agregó Castro Marte.

El obispo dijo que la Iglesia, siempre que se ha requerido la mediación, ha estado en la disposición y reiteró que confían en la madurez del liderazgo nacional, que, aseguró, se colocará a la altura de las circunstancias actuales.

Consideró que los ejes en torno al que girará el diálogo nacional, propuesto por el Gobierno en el Consejo Económico y Social (CES), con la participación de “una parte del liderazgo político, económico y social” responden a las necesidades actuales del país.

Castro Marte dijo que las reformas se han estado postergando por décadas. Entre estas citó cambios en áreas sensitivas como la Policía Nacional, la seguridad social, la seguridad ciudadana, los derechos de tercera y cuarta generaciones, así como una reforma fiscal.

Además, la calidad educativa, el transporte y toda la red vial. También, la gestión ambiental, las concesiones mineras, la disponibilidad y distribución de electricidad, la conectividad real, la democratización del crédito, los temas de fronteras y límites marinos y la marca país como calidad de vida y no como una plaza de diversión.

Camino inicial de un plan más abarcador

Castro Marte puso énfasis al tema de la delincuencia, de la cual precisó que las autoridades no pueden darse el lujo de que continúe tomando más terreno y mantengan a las personas en zozobra. “Los organismos de seguridad no están haciendo bien su labor”, expresó. El obispo considera este llamado a diálogo como un camino inicial de un plan más abarcador. “En donde todas las fuerzas vivas de la sociedad, los que generan y constituyen la sociedad, se sientan involucrados en una nueva expresión de su participación ciudadana, política y democrática”, agregó. Por otro lado, dijo que el crecimiento económico que se viene registrando en los últimos períodos no se ha reflejado en un desarrollo social, ya que el Estado ha fallado en asegurar una justa distribución de las riquezas.

ROSMERYS DE LEON

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