La variante ómicron de covid-19 ha vuelto a restringir la actividad social en varios países europeos, mientras que cada vez son más los que blindan sus fronteras frente a los vuelos procedentes de países de África austral para intentar frenar el aumento de los contagios.
Países Bajos está ya en confinamiento nocturno para las actividades no esenciales, el Reino Unido reintroducirá el martes mascarillas en tiendas y transporte e Israel se ha convertido en el primer país del mundo en reintroducir la prohibición de entrada al país de los extranjeros.
Mientras tanto, siguen apareciendo casos de la variante ómicron: las autoridades sanitarias de Países Bajos han confirmado este domingo la presencia de al menos 13 casos entre los 61 pasajeros que dieron positivo el pasado viernes tras aterrizar en el aeropuerto de Ámsterdam en dos vuelos procedentes de Sudáfrica.
MASCARILLAS OBLIGATORIAS
Las mascarillas volverán a ser obligatorias en comercios y el transporte público en Inglaterra a partir del próximo martes, indicó este domingo el ministro de Sanidad, Sajid Javid, lo que supone una importante «marcha atrás» con respecto a la eliminación de las restricciones del pasado mes de julio.
Ese mismo día se pedirá a los viajeros vacunados que se hagan un test PCR, y no de antígenos, a su regreso al Reino Unido.
Javid dijo que la situación «no está ni de lejos» tan mal como para pedir trabajar desde casa o reintroducir la obligación de mantener la distancia personal o reducir el contacto social.
Desde las 05.00 hora local (04.00 GMT) de la pasada madrugada, los holandeses vuelven a la distancia interpersonal y el uso obligatorio de mascarillas en la hostelería, los cines y teatros, además de otros espacios cerrados de acceso al público.
Los comercios, la hostelería y otros lugares considerados actividades no esenciales como los gimnasios, las piscinas o los museos deberán cerrar máximo a las 17.00 hora local (16.00 GMT). Se salvan de esta restricción los supermercados, farmacias y gasolineras, que podrán cerrar a las 20.00 horas (19.00 GMT).
MÁS FRONTERAS BLINDADAS
De todas las medidas de blindaje fronterizo, la de Israel es la más tajante: vuelve a cerrar sus fronteras a todos los extranjeros durante dos semanas para contener la propagación de la variante ómicron de la covid-19 y se convierte así en el primer país del mundo en hacerlo.
El gabinete interministerial de coronavirus decidió anoche el cierre de los aeropuertos a vuelos internacionales de todo el mundo, así como reimponer la cuarentena obligatoria a los israelíes que regresen al país, medidas que se impondrán en la madrugada del domingo al lunes.
Pero además, Filipinas ha sido el primer país que impide la entrada desde este domingo no solo a los extranjeros que en las dos últimas semanas hayan estado en siete países africanos (Sudáfrica, Botsuana, Namibia, Zimbabue, Lesoto, Suazilandia y Mozambique), sino que incluye además a países europeos (siete en total: Austria, la República Checa, Hungría, Países Bajos, Suiza, Bélgica e Italia).
Indonesia y Nueva Zelanda también han decidido este domingo restringir la entrada de viajeros extranjeros procedentes de países de África austral.
SIGUEN DETECTÁNDOSE MÁS CASOS DE ÓMICRON
Los casos de la variante Ómicron siguen detectándose en varios países. Las autoridades sanitarias de Países Bajos han confirmado este domingo la presencia de al menos 13 casos de la nueva variante entre los 61 pasajeros que dieron positivo el pasado viernes tras aterrizar en el aeropuerto de Ámsterdam en dos vuelos procedentes de Sudáfrica.
El Instituto de Salud Pública (RIVM) está analizando este fin de semana las muestras recogidas a 61 de los 624 pasajeros que llegaron el viernes de Johannesburgo y Ciudad del Cabo, aunque la investigación de las demás pruebas positivas continúa por lo que los casos de la nueva variante pueden aumentar.
El ministro israelí de Salud confirmó un primer caso de contagio con la nueva variante -un ciudadano israelí procedente de Malawi- y en estos momentos hay al menos otros siete casos sospechosos de estar infectados con la ómicron.
Australia confirmó este domingo sus dos primeros casos tras analizar la secuencia del virus de dos pasajeros provenientes del sur de África que habían dado positivo.
Dos pasajeros que aterrizaron el pasado 24 de noviembre en el aeropuerto de Múnich, procedentes de Sudáfrica, fueron confirmados, mediante PCR, como infectados con la variante ómicron del coronavirus.
El Instituto Superior de Sanidad (ISS) de Italia informó de que ha localizado un caso «atribuible» a la cepa ómicron del coronavirus detectada en Sudáfrica y que está sometiendo la prueba a una nueva confirmación.
Las autoridades sanitarias británicas han detectado dos casos de personas portadoras de la variante ómicron del coronavirus, que están ahora haciendo cuarentena.
EFE