SANTO DOMINGO.- El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Miguel Ceara Hatton, luce optimista cuando extiende la mirada a 2021, y para ello toma de referencia los pronósticos del mes de octubre de este año del Fondo Monetario Internacional (FMI), en los que indica que República Dominicana crecerá 4%.
Aunque son cifras que se mueven, es un número importante si se toma en cuenta que en el año actual –2020- Estados Unidos tendrá un déficit de 16.7% del Producto Interno Bruto (PIB), Reino Unido de 15.5% y Japón 13.9%, mientras que China tendrá un déficit primario de 10.9%. En general, el 95% de los países tendrá un déficit primario, y 99 naciones tendrán un déficit superior a -10%. El mundo, en general, caería 4.16%, según el FMI.
Se espera que en noviembre y diciembre haya nuevas estimaciones sobre el tema. De hecho, el propio Ministerio de Economía dominicano tiene un equipo de expertos que proyecta el crecimiento económico cada mes.
En el caso local -para 2020- el FMI calcula que se tendrá un déficit primario de -4.6%. El déficit primario es la diferencia entre los gastos corrientes de un Estado y su recaudación de impuestos.
“Esperamos que el año que viene haya una reactivación en el mundo, que junto con las políticas que estamos aplicando en el país, internamente, podamos aprovechar mucho mejor el rebote mundial. Eso implicaría creación de empleos, generación de divisas e inversión en todo el territorio nacional, pero sobre todo, y es lo más importante, creación de empleos para mejorar la calidad de vida de la gente”, dijo Ceara Hatton, entrevistado en el Almuerzo Semanal de Multimedios del Caribe.
El funcionario calcula que a nivel mundial habrá una flexibilización para el pago de deudas. “Señores, esta es una crisis mundial, no es una crisis de un país. No es posible una solución en un solo país; es imposible. Tiene que haber un reordenamiento, como ha habido en otros momentos a nivel mundial”, advirtió.
En otro momento de la conversación destacó la necesidad que ha tenido República Dominicana de endeudarse para proteger la salud y vida de las personas. “No es fácil decir que no nos vamos a endeudar en un momento como este. Yo no le puedo decir a este país que no me voy a endeudar y que voy a dejar que la gente se muera por no querer endeudarme por defender un déficit público. Eso no es posible. La prioridad como gobierno debe ser la de proteger la gente”, planteó. Y agregó que en el dilema de salud y economía, la prioridad es la salud.
Ceara Hatton calcula que si se logra mantener el equilibrio alcanzado hasta ahora, entre manejo de la enfermedad y apertura económica, el impacto negativo siempre podrá ser menor. “Si se logra eso, podremos tener un ajuste, pero no podemos abrir de golpe todo. Tiene que haber un equilibrio entre flexibilización y el control… la vigilancia de la enfermedad”, indicó.
Estuvo acompañado en el encuentro de Erick Dorrejo, director de Planificación y Desarrollo de la Zona Fronteriza; Martín Francos, director general de Inversión Pública y Elvira Lora, directora de Comunicaciones del Ministerio de Economía. Por elCaribe participaron el director Osvaldo Santana, el subdirector Héctor Linares y el jefe de Redacción de Apertura, Héctor Marte Pérez.
A todos les explicó el ministro Ceara Hatton que la administración de Luis Abinader tenía concebido un plan de gobierno que se ha visto afectado por el curso de la pandemia de Covid-19. Se trata de una situación inesperada que llevará al 87% de los 193 países del mundo -de los cuales el FMI prepara cifras- a registrar una tasa de crecimiento negativa. “Hay 32 países que tienen un crecimiento negativo inferior a 20% y 10 y 20% hay como 70 países”, calculó el funcionario público, inicialmente haciendo cálculos aritméticos “de cabeza”, mientras dialogaba y respondía una y otras preguntas formuladas. Está acostumbrado a eso.
Miguel Ceara Hatton es economista de profesión, catedrático de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) e investigador del Centro de Estudios Económicos y Sociales José Luis Alemán.
Sus áreas de interés profesional han sido, fundamentalmente, macroeconomía, desarrollo económico, teoría económica, políticas públicas y economía y política internacional.
Entre 1996 y el 2001 ocupó la posición de director en Comercio, Turismo y Cooperación de la Asociación de Estados del Caribe (AEC) en Trinidad y Tobago, siendo elegido por los cancilleres del Gran Caribe.
Entre septiembre del 2003 y junio del 2011 fue el coordinador nacional de la Oficina de Desarrollo Humano del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) siendo responsable del Informe Nacional de Desarrollo Humano. Además, fue miembro del Consejo Editorial Internacional de la Revista Latinoamericana de Desarrollo Humano.
Entre 2002 y 2003 fue el director de Organismos Internacionales en el Ministerio de Relaciones Exteriores (Mirex) y asesor del Canciller en temas comerciales, entre otras funciones en las que se ha destacado.
De acuerdo con lo externado por Miguel Ceara Hatton, la situación se ha hecho más complicada a nivel mundial porque se está viviendo un segundo rebrote de la enfermedad (de Covid-19) en la mayoría de los países. “Conscientes de que es muy difícil garantizar un crecimiento sostenible en un país, en forma aislada de lo que está aconteciendo en todo el mundo, estamos tomando medidas para beneficiar a una serie de sectores y avanzar en una agenda de pequeñas reformas importantísimas, por ejemplo, en el ámbito de la justicia, y de cambios institucionales que nos permitan sostener la actividad económica, a la población y eventualmente nos permitan aprovechar más el rebote (crecimiento) de la economía que esperamos se dé el año que viene”, indicó el ministro de Economía.
Algunas de las acciones que ha ido encaminando el Gobierno para dinamizar la economía incluyen, por ejemplo, apoyo al sector agrícola, especialmente cultivos de ciclo corto con financiamientos de tasa cero, para incentivarlo, y la realización de pequeñas obras públicas en todo el territorio nacional. Eso incluye limpieza de canales, limpieza de cañadas, trabajos en pequeños acueductos, construcción de reservorios de agua, respaldo para sostener la actividad turística, apoyo a las zonas francas y otros.
De otro lado, indicó que entre marzo, abril y mayo de este año entre los que pagaban la seguridad social se retiraron alrededor de 500 mil personas y ya se han recuperado alrededor de 250 mil o un poco más.
El ministro de Economía explicó que los programas FASE, Quédate en Casa y Pa ti no se pueden sostener como están en la actualidad y aseguró que las decisiones que se han tomado van en la dirección de revisar la base de datos del Sistema Único de Beneficiarios (Siuben). “El que no esté en Siuben no recibiría la ayuda. “Hay una gran cantidad de personas que reciben la ayuda, pero no están en Siuben. Entonces se cometen dos tipos de errores: Los que deberían de estar y no están, y los que están pero no deberían estar. Entonces, se está revisando toda la base de datos; estamos haciendo cálculos y buscando una estrategia que nos permita en el marco de la estrechez fiscal que tenemos… que nos permita mantener aunque sea parcialmente esos programas”, sostuvo.
“Estamos revisando bien los números, una cosa que no podía hacerse antes, porque hay que reconocer que el gobierno pasado tuvo que implementar las medidas precipitadamente por la forma como se presentó la pandemia. Nosotros llegamos y teníamos otra propuesta, pero entendíamos que si se eliminaban estos programas la gente no iba a aceptar que en un mes no recibiera la ayuda, por si se presentaba cualquier problema. Podía presentarse un problema y la gente quedar afectada”, dijo.
La mirada es ampliada a toda la geografía nacional
El Gobierno que dirige Luis Abinader tiene como política establecer oportunidades en todo el territorio nacional, de acuerdo con lo expuesto por el ministro de Economía. “El territorio era invisible, pero hoy día está muy visible y hay una política de apoyo a las pequeñas empresas, de intervención en la zona fronteriza y estamos trabajando con el sector agropecuario, trabajando para mejorar la eficiencia del Estado y muchas otras áreas. El problema es que no podemos dejar que ninguna actividad económica se cierre, porque después que se cierra una actividad económica, resulta muy difícil abrirla”, planteó. Resaltó el foco principal del presupuesto está orientado a salud, educación, apoyo a sectores productivos, agua, vivienda u otras áreas.
Los programas podrían costar 120 mil millones
Continuar con los programas de ayuda por la pandemia, implementados desde el pasado gobierno, podría costar en término de un año alrededor de RD$120,000 millones, calcula el ministro Ceara Hatton. “Lo que se está revisando es si todo el que lo tiene realmente lo necesita o si hay empresas que están alcanzando el 75 o 80% de sus operaciones. Cuando una cuando una empresa alcanza ese nivel en sus operaciones no necesita asistencia del Estado para sostener el empleo. Todo eso se está revisando”, apuntó.
En cuanto a la situación de la pobreza, los números que maneja Ceara Hatton, cortados a junio, indican que aumentó. Pero pasados cuatro meses y medio habría que revisar lo actual. “En junio, en teoría, la pobreza debió haber subido de 21.4% a 34.6%. Sin embargo, el efecto de los programas Quédate en Casa, FASE y Pa tí hizo que el valor real de la pobreza solamente aumentara a un 27.4%. Por el efecto de las políticas de asistencia se redujo del que se podría tener potencialmente, que era 34.6%, a 27.4%. Ese es el efecto que tiene, aunque con eso no se va a resolver todo el problema de la pobreza”, dijo Ceara Hatton en el diálogo.
MARTIN POLANCO