El presidente de Colombia, Gustavo Petro, invitó este viernes a los campesinos cocaleros a discutir con el gobierno sobre una transición hacia una economía legal, durante una visita a la región con más narcocultivos del mundo.
«Me parece una idea sugerente, interesante, que se realice en el Catatumbo», una región fronteriza con Venezuela, «la primera asamblea de campesinos cultivadores de coca», dijo Petro en un discurso en el municipio de El Tarra (este).
El Catatumbo es la región con más hectáreas de coca sembradas del mundo (40,000), según el último conteo de la ONU, de 2020, y una de las mayores rutas del narcotráfico.
Las conclusiones de los cocaleros en esa asamblea, enfatizó Petro, le mostrarán al gobierno «los caminos, las políticas públicas, los senderos que permitan lograr que una familia campesina que hoy se dedique a la hoja de coca (…) pueda sustituir eso por una actividad [legal] que le garantice más calidad de vida».
No obstante, el mandatario no anticipó una fecha para dicha reunión.
Desde antes de llegar al poder en el mayor productor de cocaína del mundo, Petro ha manifestado su intención de cambiar el enfoque punitivo hacia los sembradores del producto base de esa droga, a quienes considera víctimas.
Durante el evento de este viernes, el primer presidente de izquierda de Colombia aseguró ser el único jefe de Estado que ha visitado esa región, donde los grupos armados como la guerrilla del ELN imponen su ley y dominan esa economía ilegal.
El miércoles, desconocidos abrieron fuego contra una camioneta que hacía parte de la avanzada de Petro, a unos 46 kilómetros de la frontera.
«Aquí volveremos al diálogo regional», concluyó Petro, al invitar a las autoridades locales, a la Iglesia católica y los campesinos a que organicen «en la brevedad» el «primer diálogo regional del Catatumbo».
AFP