Santiago. La construcción en un relleno sanitario intermunicipal pondría fin al problema que enfrenta el municipio de Tamboril y otros poblados del Cibao, donde las humaredas son constantes, debido a la incapacidad económica para dar mantenimiento a los vertederos.
Este espacio tendría capacidad para depositar tres mil toneladas diarias de desperdicios. Reynaldo Peguero, director ejecutivo del Consejo para el Desarrollo Estratégico de Santiago, indicó que ha faltado un gran convenio de gestión y de solución entre alcaldías de Santiago y Tamboril con la participación financiera del ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, el Ministerio de Salud Pública y Proyectos Estratégicos y Especiales de la Presidencia (Propeep).
En tal sentido, llamó a consolidar los avances del ecoparque de Rafey y que a la vez, sea levantado un relleno sanitario fuera de ese lugar, en un territorio interconectado que permita a municipios como Tamboril, Moca, La Vega, Santiago de los Caballeros y sus diversos distritos municipales llevar la basura que producen.
Planteamiento
“El convenio a ser monitoreado y vigilado por el CDES y Compromiso Santiago, debe permitir la solución y además el diseño posterior del relleno sanitario regional”, expresó el experto en planificación territorial y urbanismo. Peguero recuerda que la pasada gestión de gobierno, a través del programa Dominicana Limpia, que dirigió Domingo Contreras, llegó a un acuerdo para el cierre técnico del vertedero de Tamboril y facilitó un acuerdo con el ayuntamiento de Santiago de los Caballeros, vía la Presidencia de la República, para que asumiera la inversión en el relleno sanitario de Rafey. Esto permitiría que Tamboril pudiera emitir sus desperdicios en el ecoparque, pero las dificultades han imposibilitado la solución de este problema. Dice que la humareda del vertedero que opera en Guazumal se ha convirtiendo en un problema de salud que se manifiesta con afecciones respiratorias.
Renaldo López, residente en Guazumal, denunció que moradores de esa comunidad atraviesan una situación complicada. “Desde la tardecita hasta el otro día, aquí estamos tragando el humo del basurero y no vale las peticiones que hemos hecho a medio ambiente y el ayuntamiento para que den una solución definitiva”, apunta. Con los cambios de vientos, la zona sureste de Tamboril y algunos sectores de Santiago de los resultan ser los más afectados.
Al proyecto no se le ha dado seguimiento
El día 14 de noviembre del año 2018, a través del entonces Plan Nacional de Manejo Integral de Residuos Sólidos Dominicana Limpia se acordó el cierre técnico para dar paso a una estación de transferencia, pero la falta de apoyo técnico y recursos económicos a los acuerdos que ya se habían avanzado, han impedido que el alcalde Anyolino Germosén pueda completar la obra. Aunque está pendiente una negociación con el alcalde Abel Martínez, para que la basura sea traslada al vertedero de Rafey, no se ha avanzado en mismo. Además de un nuevo espacio, la alcaldía de Tamboril demanda de más camiones y recursos para el traslado de los desperdicios.
MIGUEL PONCE