SAN FRANCISCO DE MACORIS.- La Asociación de Porcicultores de la provincia de Duarte ha solicitado al presidente de la República, Luis Abinader, y al Ministerio de Agricultura detener las importaciones de carne de cerdo y establecer un mejor manejo del proceso de vacunación para combatir oficialmente la peste porcina africana (PPA).
La situación actual está llevando a este importante sector de la economía nacional hacia la quiebra.
Durante una rueda de prensa, los directivos de la asociación, representados por Ramón Caba y Franklin Cordero, expusieron las dificultades que están enfrentando debido a las importaciones de carne de cerdo, las cuales han reducido significativamente la producción porcina tanto en la provincia de Duarte como en el país.
La Asociación de Porcicultores de la provincia de Duarte, a través de un documento público, ha pedido al presidente de la República, Luis Abinader, que busque una solución urgente a las importaciones que se están llevando a cabo en la actualidad, ya que el sector se encuentra al borde de la quiebra total.
«Las importaciones de carne de cerdo, aunque siempre se han realizado, en esta ocasión no cuentan con una planificación adecuada en cuanto al volumen a importar, lo que genera una sobreabundancia de oferta de carne y afecta la comercialización de los cerdos que se producen en el país», indica el documento.
Los productores señalaron como ejemplo del problema que un pequeño grupo de productores de la zona de San Francisco de Macorís tiene actualmente unos 4,300 cerdos terminados esperando ser comercializados. Además, existe un gran número de pequeños productores en el país que no pueden vender sus cerdos, ya que los canales de intermediación han desaparecido debido al cierre de la mayoría de las fábricas de embutidos y plantas de sacrificio.
En su manifiesto, los productores de cerdos hicieron un llamado al presidente Luis Abinader y al Ministerio de Agricultura para que creen mecanismos de comercialización destinados a los pequeños productores que actualmente están enfrentando dificultades para vender sus productos.
Además, destacaron la necesidad de planificar y controlar las importaciones para no exceder la cantidad necesaria para el consumo nacional de carne y evitar así un problema de sobreoferta.
También solicitaron al gobierno que no permita el uso de vacunas que no estén debidamente probadas para combatir la fiebre porcina.
«Pedimos al gobierno dominicano que, debido a la situación sanitaria de la peste porcina africana que afecta a nuestro país, no permita el uso de vacunas que no estén debidamente probadas y certificadas por organismos internacionales competentes», expresaron.
En el documento, señalan que la peste porcina africana fue diagnosticada oficialmente en el país el 28 de julio de 2021, y que esta enfermedad catastrófica se introdujo debido a la falta de controles estatales en las fronteras, puertos y aeropuertos en relación a los productos cárnicos. Hasta la fecha, no se ha implementado una regulación efectiva y eficiente en estos puntos de entrada al país.
«La PPA se ha propagado por todo el país en menos de 6 meses, lo que ha causado problemas de comercialización y la quiebra de la gran mayoría de los productores nacionales afectados tanto por la enfermedad como por la comercialización, lo que ha diezmado la población porcina y ha generado escasez y desempleo», afirman.
Los productores también indicaron que el desarrollo de una vacuna para la PPA ha llevado más de 60 años y que, hasta la fecha, no se ha logrado desarrollar una vacuna efectiva y segura por parte de diferentes instituciones y universidades españolas, chinas, francesas, alemanas y estadounidenses. Aunque existen prototipos de vacunas en fase de experimentación, no han brindado la seguridad necesaria para ser utilizadas de manera masiva en los países afectados por la enfermedad.
Asimismo, manifestaron que es necesario establecer mecanismos de control de la enfermedad a través de una vigilancia activa en laboratorios en las regiones afectadas, y que se deben tomar muestras de manera sistemática y efectiva en todos los cerdos de productores grandes y pequeños.
Los productores de la Asociación de Productores de Cerdos de la provincia de Duarte señalaron que el Estado, a través del Ministerio de Agricultura, es responsable de supervisar la repoblación de todas las granjas, tanto grandes como pequeñas, para controlar la enfermedad, pero hasta el momento no se ha llevado a cabo dicha supervisión.
«Es necesario llevar a cabo una extensa vigilancia epidemiológica activa contra la enfermedad, buscando los focos de infección en carnes procesadas, carne fresca y cerdos de grandes y pequeños productores, a fin de tomar medidas para erradicar la enfermedad y controlar eficientemente la repoblación que se ha llevado a cabo sin supervisión y sin autorización estatal».