POR CRISTHIAN JIMENEZ.- Muchos medios tradicionales están agonizando.
Repitieron mentiras gubernamentales durante la pandemia, y en las elecciones, asesinaron sus credibilidades, nadie les cree.
Repitieron la propaganda de la Casa Blanca, que el presidente Joe Biden tenía buena salud y podía gobernar otro período. Durante aquel penoso debate con Donald Trump, vimos que era mentira.
Kamala Harris nunca “empató” con Trump, las urnas desmintieron eso, Ucrania e Israel no ganan sus guerras, son mentiras deliberadas. Reportaron mentiras vestidas como noticias verdaderas.
Cuando Trump habló “fake news media” (medios de noticias falsas) le dijeron “loco”, ciertamente algunos locos ven cosas ocultas para cuerdos.
Ahora Trump demandó por $10 mil millones a varios medios por parcializarse contra él.
Repitiendo lo conveniente para quienes les pagaban, muchos medios suicidaron sus credibilidades, nadie les paga anuncios, quebraron, despidieron centenares de empleados, incluidos muchos periodistas mentirosos.
Los mató una sobredosis de mentiras.