Santiago. La junta de vecinos de Limonal Arriba protestó por segunda semana consecutiva con una marcha que concluyó en vigilia frente a la envasadora Coopegas.
Los manifestantes demandan de las autoridades y de los propietarios un acuerdo definitivo que impida que la planta sea reabierta.
La marcha se produjo al cumplirse cinco meses de la tragedia que dejó 11 víctimas mortales y varios heridos con secuelas permanente.
Aunque la envasadora, ubicada en la carretera Licey-Tamboril, permanece cerrada, los integrantes de la junta de vecinos temen que puedan abrir en cualquier momento, debido a que los ejecutivos de Coopegas, solo dieron su palabra verbal y no por escrito.
Los comunitarios aseguran que los directivos de la referida envasadora no dan respuestas ni tampoco muestran una constancia de que no volverán a reabrir. La fuga en una manguera, unido a una explosión, ocurrió el 3 de octubre del año pasado.
MIGUEL PONCE
