SAN SALVADOR.- Miles de salvadoreños salieron este lunes a las calles en plena cuarentena domiciliar obligatoria por la COVID-19 en busca de un bono de 300 dólares para la alimentación anunciado por el presidente del país, Nayib Bukele, para más del 75 % de los hogares, según pudo constatar Efe.
Los ciudadanos, entre ellos ancianos y adultos acompañados de niños, se aglomeraron en las sedes del Centro Nacional de Atención y Administración de Subsidio (CENADE) de diferentes ciudades e hicieron filas que se extendían por cientos de metros.
La noche del viernes, el mandatario salvadoreño anunció el lanzamiento de un sitio web en el que los ciudadanos debían ingresar el número de su documento de identidad para saber si eran beneficiarios del bono, pero el mismo colapsó por la cantidad de ingresos.
De acuerdo con las proyecciones gubernamentales, dicho bono alimenticio por 300 dólares le representará al Estado una inversión de 450 millones de dólares.
El domingo, Bukele anunció el nuevo sitio web y pidió a las personas que consideraban que necesitan el dinero y no aparecían como beneficiarios que ingresaran su reclamo o visitaran el CENADE «más cercano».
Una de las principales concentraciones se dio en el CENADE de la capital salvadoreña, donde las personas no lograban mantener la distancia recomendada para evitar el contagio y algunos no portaban mascarillas.
«Nuestra familia tiene hambre, están esperando un plato de comida» y «el pueblo pide comida, no nos soluciona nada el Gobierno», gritaron algunas personas.
Los ánimos se caldearon cuando el presidente Bukele anunció el cierre de estos centros debido a la aglomeración.
«Los CENADE están demasiado llenos, las aglomeraciones son un riesgo de contagio para usted, su vida y la de su familia, (…) así que por la salud de la población he decidido cerrarlos», publicó el mandatario en sus redes sociales.
La mayoría de personas se identificaban como vendedores ambulantes, quienes tras el cierre del CENADE de San Salvador decidieron bloquear una calle cercana por varios minutos y amenazaron con saquear algún supermercado para suplir sus necesidades de alimento.
«Lo que le pido a Nayib Bukele es que, por favor, nos ayude a todos los vendedores» porque «tenemos necesidad», dijo a Efe Mirna Zamora.
La mujer, de unos 45 años de edad y que se dedica a la venta de frutas y verdura, manifestó que en la referida página web no aparece como beneficiaria y pidió al jefe de Estado que «se ponga la mano en el corazón».
En el lugar se hicieron presentes miembros de la Unidad del Mantenimiento del Orden (UMO), cuerpo de antidisturbios de la Policía Nacional Civil (PNC).
Diferentes medios locales reportaron similares aglomeraciones en las ciudades Santa Ana (noroeste), San Miguel (este) y Soyapango (centro), sobre este último lugar se difundió un vídeo en el que un agente de la Policía rocía gas pimienta a las personas que intentaban ingresar.
El Salvador sumó el domingo 30 casos confirmados de COVID-19 y el Congreso amplió por 15 días más el estado de excepción como medida para evitar la propagación de dicha enfermedad.
A la fecha no se reporta ningún fallecido a causa de la pandemia de COVID-19 en El Salvador, donde más de 3.900 personas se encuentran en cuarentena y se reportan 12 casos sospechosos.
EFE