Santiago. El cuerpo docente de la escuela Emilio Prud’Homme define como un irrespeto hacia lo niños el deterioro e insalubridad que se encuentra este centro educativo.
La escuela, que fue reparada hace menos de un año, no está apta para iniciar el año escolar luego de que todo el plafón se desprendió dañando el sistema eléctrico. Otros de los problemas es la gran cantidad de palomas que habitan en el centro educativo, según la directora Narcisa Peña, que no permiten la concentración de los estudiantes o provocan alergias e insalubridad.
“No sé cómo fue colocado ese plafón, que se cayó con tanta facilidad, el año escolar lo terminamos porque nos revestimos de pasión, pero fue difícil concentrar 8 aulas en los espacios menos afectados”, dijo.
Igualmente, ocurrió la interrupción del cableado eléctrico y daños a las pizarras digitales.