A pocos días de iniciar su sentencia de 50 meses de prisión tras ser declarado culpable de dos cargos de transporte para ejercer la prostitución, el rapero Sean «Diddy» Combs podría enfrentarse a medidas disciplinarias en la cárcel, como la pérdida de sus privilegios telefónicos, por supuestamente haber realizado una llamada no autorizada a tres personas, según informó CBS News.
CBS, citando documentos penitenciarios, señala que la Oficina de Prisiones no permite que los reclusos agreguen a varias personas a una llamada. Mientras que el portavoz del magnate de la música niega que haya infringido ninguna norma.
En un comunicado para la revista PEOPLE, el portavoz de Combs, Juda Engelmayer, afirmó que la llamada fue iniciada por un abogado y también reveló dónde trabaja el rapero en la prisión.
«Él está en el programa de tratamiento de drogas y trabaja en la biblioteca de la capilla», dijo Engelmayer. «La llamada telefónica en la que participó la inició un abogado, y estaba amparada por el privilegio abogado-cliente, por lo que era apropiado», agregó.
«Han circulado varios informes falsos e irresponsables sobre el Sr. Combs», declaró el portavoz en alusión a reportes anteriores sobre que el empresario había sorprendido bebiendo alcohol casero en prisión.
«No ha infringido ninguna norma penitenciaria. Su sobriedad y autodisciplina son prioritarias, y las está tomando muy en serio», añadió Engelmayer.
