Nueva York.- Debido al drástico aumento del COVID-19 en esta ciudad, el alcalde Bill de Blasio reveló que existe un alto porcentaje de que se cierre temporalmente el servicio a los clientes en el interior de los restaurantes.
Si la medida llega a concretizarse, miles de dominicanos propietarios de bares y restaurantes en la Gran Manzana, incluyendo cientos de estos establecimientos en los vecindarios de Washington Heights e Inwood, se perjudicarían, informaron algunos de ellos en el Alto Manhattan, pidiendo reserva de sus identidades.
El alcalde agregó que el servicio al aire libre continuaría en esta situación y que podrían funcionar incluso en los meses más fríos.
Apuntó que los bares y restaurantes podrán contar con las cenas al aire libre en los próximos años.
De Blasio, indicó que está siguiendo los números de cerca con la oficina del Gobernador encargada de tomar la decisión.
Por su parte, el gobernador Andrew Cuomo advirtió que estos negocios en el estado cerrarán, si la tasa de hospitalización no se estabiliza en los próximos días.
Expresó que están preparando los hospitales para otra oleada de pacientes, en medio del reciente aumento en casos de coronavirus. Por tanto, el Departamento de Salud del estado ordenó a los hospitales aumentar la capacidad de camas en un 25%.
Hasta la noche de este miércoles, en el estado de NY se reportaban 35,233 fallecidos y 772,186 contagiados, y de esas cantidades en la Gran Manzana se reportan 24,411 fallecidos y 340,974 contagiados.
Autoridades de salud y médicos dominicanos en esta ciudad, quienes solicitan reservas de sus identidades, afirman que hay más de tres mil dominicanos muertos y decenas de miles de contagiados en el estado de NY.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), el centro de salud más grande en Estados Unidos, y el Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud (IHME) de la Universidad de Washington, en cuyos modelos de predicción de la evolución de la pandemia se fija a menudo la Casa Blanca, calculan que para febrero del próximo año los fallecidos por el virus en territorio estadounidense pasarían de 450 mil, si los ciudadanos no cumplen con el protocolo sanitario.
RAMON MERCEDES