WASHINGTON.- El asesor del presidente Donald Trump, Mauricio Claver-Carone, se convirtió ayer sábado en el primer estadounidense en ser elegido como presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) pese al rechazo de algunos países de que se rompiera la tradición de que la entidad fuera liderada por un latinoamericano.
El alto asesor de la Casa Blanca para Latinoamérica llegó como único candidato a la reunión virtual de los 48 gobernadores, una votación en la que se abstuvieron Argentina, Chile, México, Perú y Trinidad y Tobago, según la cancillería de Buenos Aires.
Claver-Carone recibió 30 votos de los gobernadores, con 23 apoyos de la región y sucederá al colombiano Luis Alberto Moreno a partir del 1 de octubre por un periodo de cinco años.
La decisión de Estados Unidos de presentar un candidato rompiendo con un acuerdo de caballeros generó irritación en Argentina, Chile, Costa Rica y México, debido al precedente que marca.
Estos países argumentaron que la votación -ya aplazada por la pandemia – debía volver a posponerse ya que el contexto no permitió el debate adecuado.
Un total de 16 países que representan el 31,23% del poder de voto del BID se abstuvieron.
En porcentaje ponderado según las acciones por país, Estados Unidos -principal accionista del organismo- recibió un 66,8% del total, informó una fuente de Washington.
Para ganar, un candidato debe tener el apoyo de al menos 15 de los 28 países americanos.
«Quiero agradecer a todos nuestros socios en la región por mantener la integridad de este proceso electoral y por compartir nuestra visión común de un BID más fuerte», afirmó Claver-Carone en un comunicado.
Al mando de la organización, con sede en Washington, el alto funcionario estadounidense deberá enfrentar la aguda crisis de la región y una eventual reconstrucción de Venezuela.
El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo, felicitó a Claver-Carone y lo calificó como un «líder visionario en el fomento de la prosperidad del Hemisferio Occidental».
Argentina, que buscaba presentar a su actual representante en el Banco, Gustavo Béliz, como candidato, finalmente no lo postuló y entonces llamó a la abstención.
«Politización del hemisferio»
Con la elección, la diplomacia estadounidense suma una victoria a menos de dos meses de unos comicios muy reñidos en Estados Unidos en los que Trump se juega su reelección frente al demócrata Joe Biden.
Para Christopher Sabatini, investigador sobre Latinoamérica en el instituto Chatham House de Londres, conseguir de la región que rompan con la tradición para apoyar a un candidato de la Casa Blanca es una victoria para el gobierno de Trump.
Sabatini destacó este logro «después de que la Casa Blanca insultara y le faltara el respeto a los ciudadanos de esos países».
«No es sólo una victoria diplomática, es una sorpresa y francamente una que es humillante», declaró a la AFP el experto, quien acotó que «la politización del hemisferio contribuyó a la elección del candidato».
Claver-Carone, un abogado de origen cubano de 45 años, es conocido por su firme oposición a La Habana y a Venezuela.
La brusca irrupción del candidato estadounidense generó sorpresa ya que la línea de la política exterior de Trump ha sido contraria al multilateralismo y sus instituciones, como prueba su intención de retirarse de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Pero pudo más la promesa de Claver-Carone de ser un contrapeso a la agresiva entrada de los préstamos de Pekín en la región.
Sin embargo, el funcionario estadounidense puede enfrentar problemas en el frente interno por las divisiones partidarias en el Congreso estadounidense, encargado de aprobar los fondos destinados al banco.
Para Benjamin Gedan, del programa latinoamericano del Wilson Center de Washington, la política exterior siempre implica compromisos, particularmente en la negociación con una superpotencia.
«Pero esta decisión era evitable, es significativa y no tan fácil de revertir», indicó a la AFP.
El rol del BID será central en una región devastada por la pandemia para la cual el Fondo Monetario Internacional (FMI) pronostica una contracción de la economía del 9,4%.
También, será capital para una eventual reconstrucción de Venezuela, en el caso de un cambio de gobierno.
Este banco es la única institución financiera multilateral en reconocer como miembro a un delegado del Parlamento y no del gobierno del socialista Nicolás Maduro, a quien no lo reconocen más de 50 países encabezados por Estados Unidos, los cuales apoyan al jefe legislativo opositor Juan Guaidó.
El BID nació en 1959 y ha tenido cuatro presidentes: el chileno Felipe Herrera, el mexicano Antonio Ortiz Mena, el uruguayo Enrique Iglesias y el colombiano Moreno.
AFP