MONTECRISTI.- Una unidad mixta compuesta por militares del Ejército de la República Dominicana (ERD) y miembros de la Armada custodian la desembocadura del río Masacre en la bahía de Manzanillo, provincia Montecristi.
Los soldados están acampando debajo de una lona, próximo al afluente, el cual divide la nación con el poblado haitiano Deak, perteneciente a la ciudad Fort-Liberté.
En la bahía se observa un barco de la Armada anclado en el área conocida como Punta Presidente, evitando el ingreso por el mar de los extranjeros.
Por tradición, los ciudadanos del vecino país atraviesan el Masacre en botes para dirigirse a Manzanillo, donde venden mercancías y adquieren productos alimenticios.
Además, hay quienes se trasladan a territorio dominicano a realizar trabajos ligados a la agropecuaria, construcción y en casas de familia.
Ciudadanos consultados en las calles de Manzanillo indican que el flujo de extranjeros ha disminuido considerablemente desde que el Gobierno dominicano dispuso el cierre del paso fronterizo por Dajabón, en rechazo a la construcción de un canal de riego, con el objetivo de desviar el agua del río Masacre a territorio haitiano.
Narran que han visto familias completas, con 15 y 20 años residiendo en Manzanillo, regresar a su país por la desembocadura del afluente en cuestión.
Yan Pie, entrevistado por Diario Libre mientras se disponía a retornar a su patria, declaró que puso en pausa sus actividades en el área de la construcción en el país hasta que todo vuelva a la normalidad.
Explicó que tomó la decisión de retornar a Haití por temor a que se registren incidentes en suelo dominicano.
«Espero que -ambas naciones- lleguen a un acuerdo», externó Yan Pie.
El río Masacre nace en la zona de Loma de Cabrera, en la montaña denominada Pico del Gallo, y desemboca en la bahía de Manzanillo.
Durante su trayectoria, el afluente atraviesa por territorio haitiano.
EDWARD FERNANDEZ / DIARIO LIBRE