MONTREAL, CANADA.- El piloto neerlandés Max Verstappen (Red Bull), el gran dominador del Mundial de Fórmula 1, logró este domingo un rotundo triunfo en el Gran Premio de Canadá por delante de Fernando Alonso y Lewis Hamilton, que se batieron en un emocionante pulso.
El español defendió su segunda posición de salida en Montreal hasta sumar su sexto podio de la temporada mientras el mexicano Sergio Pérez (Red Bull) finalizó en la sexta posición.
Verstappen dominó de principio a fin la carrera en el circuito Gilles Villeneuve y celebró su sexta victoria en las ocho carreras disputadas en esta temporada.
El éxito del neerlandés, lanzado a por su tercer título mundial consecutivo, representa también la victoria número 100 de Red Bull en la Fórmula 1.
Red Bull, que ha ganado las ocho carreras del año (seis de Verstappen y dos de Pérez), se unió así a las otras cuatro escuderías con más de un centenar de triunfos: Ferrari, McLaren, Mercedes y Williams.
«Estoy muy feliz ahora mismo. La victoria número 100 para el equipo, es increíble», declaró un sonriente Verstappen, de 25 años.
En su cuenta particular, el neerlandés sumó la victoria 41 de su carrera y la cuarta de forma consecutiva, tras Miami, Montecarlo y Barcelona, lo que le permite ampliar su ventaja en la clasificación general sobre su compañero ‘Checo’ Pérez.
El neerlandés, ganador el año pasado en este circuito, partía desde la primera posición de la parrilla de Montreal, donde siete de los últimos nueve ganadores arrancaron desde la ‘pole position’.
«Una batalla increíble»
Ante un Verstappen sin fisuras, la batalla entre Alonso (Aston Martin) y Hamilton (Mercedes), dos de los mejores pilotos de la historia, acaparó la mayor parte de la atención en Montreal, donde la fuerte lluvia caída en los días previos dio paso a un radiante sol.
El español, que el mes próximo cumplirá 42 años, fue adelantado por el británico en la salida pero antes de mitad de carrera recuperó la segunda posición y la conservó hasta el final en este circuito urbano emplazado en la isla artificial de Notre-Dame.
«Me hubiera gustado presionar más a Red Bull pero perdí la segunda posición con Lewis y hoy todo fue con Mercedes», declaró Alonso, dos veces campeón mundial.
«Lewis me presionó toda la carrera. No tuve ni una sola vuelta donde me pudiera relajar un poco, fue una batalla increíble», aseguró.
«Es todo un honor estar ahí arriba (podio) con dos campeones del mundo», dijo de su lado Hamilton, ganador de siete Mundiales. «Me ha hecho mucha ilusión ser tercero, hoy no tuvimos el ritmo necesario».
‘Mad Max’ intratable
En una salida limpia de carrera, Verstappen mantuvo la primera posición y Alonso perdió la segunda en favor de Hamilton.
El veterano español, que sigue peleando por su primera victoria en la última década, no se resintió del golpe y se pegó a la rueda del británico.
Alonso se quedó atrapado entre Hamilton y su compatriota de Mercedes George Russell pero no quitó el pie del acelerador en busca de recuperar la segunda plaza.
La pinza al español terminó cuando Russell impactó contra un muro y, tras un cambio de alerón, volvió a la pista a la cola de la carrera pero acabó retirándose en la vuelta 55.
Alonso aprovechó el respiro para lanzar un nuevo ataque y adelantar a Hamilton en una gran maniobra en la vuelta 23.
Con el español tratando de recortar los tres segundos que le sacaba Verstappen, su compatriota Carlos Sainz (Ferrari) y el mexicano Sergio Pérez (Red Bull) intentaban meterse también en la pelea por el podio después de haber remontado desde el undécimo y duodécimo lugar de salida.
Sainz rodaba más rápido que su compañero Charles Leclerc, que ocupaba la cuarta posición, pero Ferrari decidió no intercambiar posiciones entre sus pilotos.
En cabeza de la carrera, Alonso quería cumplir su promesa de presionar al intratable ‘Max Max’ que, aunque avisaba por radio que sus neumáticos perdían agarre, no dejaba que la distancia con el español bajara de los tres segundos.
Alonso, que en la vuelta 42 se colocó los neumáticos duros, le pedían que regulara el consumo de combustible ante la agresividad de su estrategia.
El asturiano replicó a equipo que su objetivo era la victoria pero, con casi ocho segundos de desventaja respecto a Verstappen al entrar en las últimas 10 vueltas, tuvo que poner su atención en el retrovisor para conservar la segunda plaza frente a Hamilton.
AFP