SANTO DOMINGO.- Con lágrimas de felicidad Yocairy Amarante, la joven a la que le arrojaron ácido del diablo hace poco más de un año, cerró el caso que le cambió la vida para siempre.
La tarde de este jueves le dictaron 30 años de prisión a los responsables del crimen, tanto al autor material como a los individuos que por RD$3,500 les lanzaron le la sustancia a la joven.
Con voz entrecortada, Yocairy expresó a los medios que la esperaban fuera de la sala de audiencias que “llora de felicidad” porque se hizo justicia.
“Estoy llorando de la felicidad porque mi caso no quedó impune y se hizo justicia”, dijo entre lágrimas.
Sus familiares se unieron al llanto de júbilo y dieron las gracias a Dios, al presidente Luis Abinader y al pueblo dominicano porque “no los abandonaron”.
“La batalla del hospital, de venir todos los meses a este juicio. Le doy gracias a Dios y al presidente que no nos abandonó, gracias al pueblo dominicano que no nos abandonó”, dijo la madre de la joven.
La defensa de Yocairy expresó que este jueves “se hizo justicia” .
“El caso de Yocairy Amarante hace una reflexión a la sociedad, al Poder Ejecutivo y al Poder Legislativo que promulgue una ley que incremente la pena para aquellos que utilizan el ácido del diablo para realizar este acto de tortura”, indicó la abogada.