POR JAVIER FLORES.- Cada vez son más los dirigentes del gobierno y del Partido Revolucionario Moderno (PRM) que hacen públicos sus pronunciamientos “a favor” de que el presidente Luis Abinader repita como el candidato de esa organización política y busque un segundo mandato consecutivo en 2024.
El más reciente de ellos fue el actual ministro de Industria, Comercio y Promiphymes, Víctor (Ito) Bisonó, que juramentó a las “más de 20,000 personas” que integran su equipo político en miras de promover y apoyar la repostulación de Abinader; allí con un grito que podría recordar otra consigna de los 80 y 90, las personas manifestaban que “Abinader, vuelve y vuelve”, al tiempo que el funcionario y miembro de la dirección ejecutiva del PRM destacaba que el jefe de Estado es “un hombre trabajador y dedicado”.
Las pugnas reeleccionistas se hacen presentes en toda actividad que el presidente tiene en exteriores, previo al acto de lo que fue la inauguración de la Feria Agropecuaria, se hizo visible que un grupo de personas del denominado movimiento “No Mire Pa’ Trá’” se encontraban con pancartas solicitándole al mandatario “cuatro años más”.
Mientras que las pancartas serigrafiadas daban a entender que se trataba de una campaña planificada, los miembros de ese movimiento expresaban que el “cambio debe de continuar”; sin embargo, dos de las personas que se encontraban con el movimiento tenían colocados carnets que los identificaban como miembros de órganos de la administración pública. Uno de ellos tenía una identificación del Ministerio de Agricultura, mientras que el otro llevaba uno de la Comisión de Apoyo al Desarrollo Barrial de la Presidencia.
Esa demostración es el principal señalamiento de que la propaganda y promoción de la figura política del mandatario se ha convertido en una clara prioridad, todo esto sin recordar que a finales del mes de septiembre de 2022, el ministro Administrativo de la Presidencia y presidente del PRM, José Ignacio Paliza, dijera a reporteros que cubren en el Palacio Nacional que de llevarse a cabo las elecciones nacionales, en las circunstancias actuales, Luis Abinader ganaría “sin mayores contratiempos” en primera vuelta, y el partido oficialista doblaría la cantidad de votos que saque quien ocupe el segundo lugar.
Además, dijo que en el partido están confiados de que se podrían repetir los números del 2020 cuando obtuvieron un 53,03% de los votos.
En lo que va de este año, las intenciones sin ser escondidas se hacen aún más claras, ya que siquiera en la Asamblea Nacional, al tiempo que el jefe de Estado daba su discurso de rendición de cuentas, varios de los presentes también comenzaron a vociferar “cuatro más”, lo cual fue mal visto por varios miembros de la oposición debido a que rompía con la solemnidad de la ceremonia.
Eso sucedía mientras a las fuera del Congreso Nacional ese 27 de febrero, algunos ciudadanos sostenían pancartas que decían “4+ para Abinader”, “Porque lo está haciendo bien, 4+”, además otras portaban zancos en la entrada. A su llegada a la sede del Poder Legislativo, el mandatario recibió una ovación con el grito de “cuatro más, cuatro más”, y protestantes del 30 % de la AFP se enfrentaban a unidades de la Policía Nacional.
Justo ese día, José Ignacio Paliza señaló que esa es “una conversación de futuro”; mientras que otros funcionarios ven favorable el panorama de una repostulación de Abinader, el cuál es un camino claro que el propio PRM ha ido limpiando, incluso cambiando sus estatus.
La única “sombra” que se puede decir se le hace al mandatario dentro del PRM, la realiza Guido Gómez Mazara, quien ha manifestado en múltiples ocasiones que quien «posibilita y garantiza» el mantenimiento del partido a la cabeza del Poder Ejecutivo es «otro candidato» y no que repita en la boleta electoral el presidente Abinader.
Mientras que fuera de allí, Leonel Fernández y Abel Martínez se perfilan a ser sus principales contrincantes.
A poco menos de tres meses de que se inicie la precampaña (el domingo dos de julio), el Presidente no ha hecho oficial sus aspiraciones, sin embargo todo parece indicar que el anuncio se realizará “más temprano” que tarde… hasta entonces, seguir esperando su promoción “no oficial”.
