Preocupa dominicanos informe establece isla de Manhattan se hunde poco a poco
NUEVA YORK.- Un reciente estudio del Servicio Geológico de EUA publicado por la revista “El futuro de la tierra” y reseñado por la prensa neoyorkina, de que la isla de Manhattan se hunde uno o dos milímetros por año, por el peso de sus enormes edificios, ha traído preocupación entre dominicanos residentes en el Alto Manhattan.
“Hay que ir pensando en mudarse lo más rápido posible del Alto Manhattan”; “tengo que poner al tanto mi familia y amigos en Washington Heights, Inwood y Harlem”, son de las expresiones entre los quisqueyanos en las avenidas Saint Nicholas, Ámsterdam, Broadway, Sherman y la calle Dyckman.
El informe establece que existe más de un millón de edificios que pesan más de 1 billón 700 mil millones de libras. Por ejemplo, el Empire State, situado en la Quinta Avenida con la calle 34, con 102 pisos y pesa 365 mil toneladas.
Este hundimiento paulatino, aunado al crecimiento del nivel del mar debido al derretimiento de los glaciares, incrementa la amenaza de inundaciones. El agua que rodea Manhattan ha aumentado aproximadamente 9 pulgadas (22 centímetros) desde 1950.
Manhattan, rodeada de los ríos Hudson, Este y Harlem, es el corazón de “La Gran Manzana” y a la vez uno de los centros culturales, financieros y comerciales más importantes del mundo.
De largo tiene 13 millas (21 km.); de ancho 2,3 millas (3,7 km); es uno de los lugares más densamente poblados del mundo, con una población, según el censo del 2020, de 1.694.251 viviendo en un área terrestre de 22,83 mi² (59,13 km²) o 72.918 residentes por mi² (28,154/ km²), la más alta densidad que en cualquier ciudad individual de Estados Unidos.
Manhattan tiene la tercera población más grande de los cinco condados de NYC, después de Brooklyn y Queens, y es el distrito más pequeño en términos de superficie. Si cada distrito se clasificara como una ciudad, Manhattan se ubicaría como el sexto lugar más poblado de los EE. UU.
Los autores del estudio afirman que los edificios pueden sufrir serios daños por la constante exposición al agua del mar. Es por esto que tras la devastación provocada por el huracán Sandy en 2012 se han creado planes para proteger las costas con malecones y una extensión del litoral.
RAMON MERCEDES