NY: Eric Adams afianza la relación con la comunidad dominicana
NUEVA YORK.- Los dominicanos son el grupo latino más grande que vive en la ciudad de Nueva York, con alrededor de 700,000 residentes y superan en número a los puertorriqueños, que fueron durante muchos años la comunidad latina con más peso en la Gran Manzana.
Inundando las calles de Manhattan de banderas dominicanas, la comunidad caribeña celebró sus festividades y por primera vez en la historia el Presidente de la República Dominicana desfiló en la fanfarria para conmemorar el 41° aniversariio del evento.
El presidente Luis Abinader acompañó al alcalde Eric Adams y a la gobernadora Kathy Hochul. «Nueva York no sería Nueva York sin nuestra comunidad dominicana», afirmó Hochul a manera de bienvenida.
El alcalde demócrata de Nueva York también tuvo palabras de halago hacia una comunidad a la que le ha hecho varios guiños.
Adams fue consciente del peso dominicano en Nueva York desde el inicio y eligió a representantes de la comunidad para altos cargos en su administración. Apenas asumió sus funciones, cumplió una de sus promesas de campaña y viajó como alcalde electo a la República Dominicana. Allí se reunió con líderes políticos y empresariales y se comprometió a crear una relación sólida entre el país y la ciudad más grande del país.
La bienvenida de Adams a Abinader contrasta con los abucheos que recibió por parte de algunos miembros de la comunidad en Manhattan y con la frialdad que Republica Dominicana recibe de Biden.
El mandatario centroamericano ha mostrado en los últimos tiempos el descontento con el trato recibido por parte de Estados Unidos.
El malestar con las políticas de Washington recae en la prohibición de las exportaciones de azúcar, la negativa a renegociar las salvaguardias sobre el arroz, la alerta de inmigración que lleva a cancelaciones de turistas y las críticas a las deportaciones legales de haitianos.
A pesar de los esfuerzos de Abinader por fortalecer las relaciones, los acontecimientos recientes han sido un revés importante.
El presidente dominicano ha apoyado a EE.UU. en temas sensibles como la guerra en Ucrania, los derechos humanos y la lucha contra el narcotráfico.
La República Dominicana, junto con Costa Rica, Panamá y Ecuador, se ha unido a la Alianza para el Desarrollo en Democracia, una asociación estratégica con la Casa Blanca impulsada por Biden.
La bienvenida de Adams a Abinader contrasta con la frialdad que Dominicana recibe de Biden. El mandatario centroamericano ha mostrado en los últimos tiempos el descontento con el trato recibido por parte de Estados Unidos.
El desfile dominicano es una fiesta cultural que no esconde la relevancia política que va ganando su comunidad. Uno de los nombres más destacados de primera línea política desde Nueva York es Adriano Espaillat, representante de los Estados Unidos para el distrito 13 del Congreso de Nueva York y el primer dominicano estadounidense y el primer inmigrante indocumentado en servir en el Congreso.
Espaillat presidió el Caucus Latino del Senado y es representante del caucus hispano, que cuestiona a Biden de manera habitual en materia de políticas migratorias.
A nivel municipal, el hombre fuerte de Adams es también un dominicano: Ydanis Rodríguez. El político de Inwood estuvo entre los partidarios más cercanos del alcalde durante las primarias y a menudo apareció a su lado en la campaña electoral. Rodríguez comanda el Departamento de Transporte y se comprometió a convertir a Nueva York en «la ciudad más amigable para peatones y ciclistas de la nación».
En materia de inmigración, uno de sus logros más relevantes fue el patrocino de la legislación que daría derecho a votar en las elecciones municipales a los vecinos de Nueva York que sean residentes permanentes legales o tengan una autorización de trabajo. Presente en el desfile, Rodríguez afirmó a LPO que los domincicanos deben ser incluidos dentro de la mesa de toma de decisiones en Nueva York.
La paradoja es que la mayoría de los representantes dominicanos en Nueva York forman parte del ala progresista del Partido Demócrata y forman un frente que cuestiona tanto al alcalde Adams como a la gobernadora Hochul.
Tal como contó LPO, en las últimas semanas, el ala progresista demócrata ha estado reuniéndose para catapultar la figura de otro dominicano, Antonio Reynoso, para capitanear una ofensiva frente al alcalde Adams de cara a las futuras elecciones municipales.
Reynoso fue relevo de Adams al frente de la presidencia del barrio de Brooklyn. En un acto en su barrio natal para honrar a los dominicanos, Reynoso habló con LPO. «No se trata solo de divertirse. También se trata de honrar el sueño dominicano y caribeño: los sacrificios que hacemos para que nuestros hijos tengan la libertad de lograr sus sueños», dijo.
La paradoja es que la mayoría de los representantes dominicanos en Nueva York forman parte del ala progresista del Partido Demócrata y forman un frente que cuestiona tanto al alcalde Adams como a la gobernadora Hochul.
Otro nombre con acento dominicano que desafía al alcalde Adams es Carmen De La Rosa, primera mujer dominicana elegida para representar al Distrito 10 en el Ayuntamiento y miembro del Caucus Progresista del Consejo.
De La Rosa prometió luchar contra los recortes de Adams en educación y planes de vivienda. Recientemente el Caucus Progresista vivió una escisión de sus miembros y De La Rosa quedó del lado del grupo que perdió peso, con la misión de reconstruir su estrategia.
El Desfile Dominicano, cuyo eslogan este año fue «Nuestra Historia, Nuestra Gente» contó con la participación de varios otros nombres que conforman los distintos estamentos de gobierno en los que los dominicano americanos son cada vez más visibles.
EDGAR COSTA