Si Franklin se equivoca, Amílcar le gana más fácil que a Siquió
POR ISIDRO MARTÍNEZ UREÑA.- Con este artículo me ganaré mil enemigos, porque aquí existe una intolerancia que sobrepasa los límites de la prudencia, generalmente, de los que leen el título y no el fondo del mismo.
El lector quiere que el que escribe diga exactamente lo que él quiere escuchar, y que lo que se diga vaya de la mano de sus intereses o de su imaginación.
Con éste artículo, si se le puede llamar así, me ganaré enemigos gratuitos, pero, como el tiempo se encarga de aclarar todos, pronto serán otra vez amigos, aunque aquí, los amigos aumentan y disminuyen, dependiendo de la situación económica, y si ocupa un cargo en el gobierno.
El diputado FRANKLIN ROMERO, irrumpió en la política, un poco retrasado en el tiempo, pero, a tenido éxito y marcha con buen pies y por buen camino.
Es un ciudadano relativamente joven, y no hay espacio para la desesperación, él es, de por sí, una persona pausada de naturaleza, pues, me he motivado a escribir este mensaje, porque estoy escuchado a muchos amigos decir, que ya FRANKLIN es senador, que FRANKLIN ganó, que FRANKLIN no tiene que hacer mucho esfuerzo para ganarle a AMILCAR, que AMILCAR no tiene nada que buscar en esta elecciones, y que AMÍLCAR se va, y que se va, y no creo que sea imposible, que FRANKLIN pueda ganar la candidatura senatorial, porque él es un buen ciudadano con buena imagen personal, emprendedor, solidario y buena persona, pero, no es a un sambá que él va a golpear a su antojo, no es imposible, puede ser, si hace lo qué hay que hacer. Pero, él tiene que saber, que su partido está formado por estructura recién creada, y como la población no siente pasión por los partidos y su bandera, tiene que fortalecer su candidatura alrededor de su figura personal, haciendo contacto directo, con los dirigentes de los partidos que lo apoyan, y también, con personas importantes, cacique barrial y campesinos, clubes culturales, juntas de vecinos, y frentes de masas.
Porque las personas, no van a votar por partido ni por bandera, sino, por el candidato, y en la medida, que el candidato aumente su presencia y su confianza en los votantes, mejores serán los resultados.
En la gallera, los jugadores, antes de hacer su apuestas, preguntan por el nombre de la traba de donde viene el gallo, es decir, que juegan a la traba no al gallo, distinto al escenario electoral dominicano, en donde el votante pregunta por el candidato, no por el partido.
Todos los proceso histórico son distintos y no tienen porque repetirse en el tiempo, porque las causas que intervienen en uno, no están presente en el otro.
En las primarias de los partidos, AMILCAR obtuvo cuatro veces más votos que FRANKLIN, pero, la primaria del PLD fueron abierta y la del PRM cerrada, y además, LEONEL no estaba a su favor, como lo está ahora, pero, tiene que pedirle a LEONEL, en una visita que haga aquí, que se pronuncie y llame a votar por su candidatura, porque en política, lo que abunda no daña.
Franklin es más joven que Amilcar, y goza de buena salud, lo que le permite aumentar su presencia en todos los lugares, pero, es peligroso, creerse campeón sin que el árbitro lo haya declarado, más, cuando el contrario no ha aprobado la agonía de la derrota, y que sólo conoce el éxtasis de la victoria, con más vuelos, experiencias, recursos, apoyado por el Estado, gran competidor, sabe como se gana, y en este proceso están en juego todos los cinturones.
Amilcar ganó en el año 2006, en el 2010 y en el 2016, a HERNANI SALAZAR y a SIQUIÒ NG porque independientemente de su capacidad, aprovechó el triunfalismo del contrario, para alzarse con la victoria.
Al final, quiero decir, que cuando se vaya a enfrentar a un gallo viejo, hay que tener cuidado, mucho cuidado, porque ésto gallo, con el paso del tiempo se le tuercen las espuelas, y cuando te vuelan encima, no te cortan de entrada sino cuando viene de retirada.
Hasta luego.
EL AUTOR ES ABOGADO Y POLÍTICO