El municipio de Luperón fue escenario de protestas la noche del martes cuando sus residentes se manifestaron en reclamo de que no sean desalojadas las familias que residen en las áreas protegidas, de humedales y mangles.
Quema de neumáticos, lanzamientos de piedras a las calles y amplias protestas en diferentes sectores, fue el escenario predominante en el municipio, donde la Policía desplegó un amplio contingente para tratar de frenar la situación caótica.
Los residentes indican que no pueden ser desalojados sin que el Gobierno les provea un lugar donde vivir, ya que llevan años residiendo en el lugar.
De acuerdo con reportes del periodista Julián Pichardo, en la zona residen más de 200 familias, las cuales llevan años allí autorizadas por diferentes administraciones del ayuntamiento de Luperón, contando con permisos del departamento de planeamiento urbano y actos notariales y muchos han realizado mejoras importantes en sus viviendas.
Medio Ambiente notificó este martes a los residentes dándoles un plazo de 15 días para desalojar el lugar a partir del 11 de noviembre alegando que son invasores y que han causado un daño significativo en el humedal, ubicado en el sector Mangles Abajo.
El ministro de Medio Ambiente, Paino Hernández, informó que se solicitará el apoyo del Ministerio de la Presidencia para el manejo social de las personas afectadas y que se acordó una reunión el 14 de noviembre con el objetivo de buscar soluciones viables para las familias que deberán abandonar el lugar.
EDGAR LANTIGUA
